Prueba: Ford Explorer PHEV, un SUV de otra dimensión
Ford mostró ayer la nueva generación del Ranger, en boca de Ford, el pick up más inteligente, versátil y capaz de todos los tiempos y que está llamado a liderar un mercado cada vez más competitivo y con excelentes productos.
Y hoy la prueba que nos atañe, va sobre el SUV de gran tamaño de la marca, uno de esos SUV que llaman la atención allá por donde pasan, ya sea por su tamaño o ya sea por esa estética tan diferenciadora muy yankee, se trata del Ford Explorer, que además viene con sorpresa, y es que en su única motorización de 457 CV, incorpora la tecnología híbrida enchufable.
El Ford Explorer en España sólo se vende con esta mecánica Plugin-Hybrid y en un solo acabado (lo único que podemos elegir es el color) y tiene un precio de 79.350€, algo que en principio puede tirar para atrás, pero creo que es mejor que descubráis TODO lo que lleva, porque la relación calidad/equipamiento/precio es sobresaliente.
Para los más puristas, echarán de menos una mecánica turbodiésel, pero visto lo visto actualmente con las políticas respecto a estos motores, no encaja mucho, así que muy acertadamente, los de Ford incorporan un sistema híbrido enchufable.
Gracias a este sistema además de rebajar los consumos, se beneficia de la Etiqueta CERO (azul) de la DGT, podremos circular por cualquier sitio de baja contaminación y aparcar sin coste en muchas ciudades.
Diseño exterior
Para ponernos en contexto, estamos ante un SUV grande, en el no han querido que las 7 plazas penalizaran el maletero, y donde se buscaba también mucha habitabilidad interior.
Para ello han creado un vehículo de 5.06 metros de largo, 2 metros de ancho y 1.78 metros de alto. La batalla con unas dimensiones brutales, alcanza los 3.025 mm y las vías delantera y trasera 1.704 y 1.713 mm, respectivamente.
Vista frontal, marcando presencia
Si hay algo por lo que se diferencia el Explorer dentro de la gama Ford es por su fuerte personalidad y su robusta presencia. Tiene un magnetismo que te atrae desde el principio, conjuga presencia de todoterreno, con elementos de deportividad (será su acabado ST-Line), y hace de él un producto llamativo.
Esta versión híbrida enchufable incorpora la toma de carga en la aleta delantera izquierda.
En la vista frontal destaca la gran parrilla con diseño de malla y acabado negro. A ambos lados, faros Full LED enormes que incorpora el sistema de largas automáticas.
Por debajo de los faros, se colocan unas tomas de aire a cuyos lados se ubican las luces antiniebla enmarcadas en embellecedores plásticos. Más abajo hay una tercera entrada de aire y los sensores de aparcamiento.
Vista lateral, se ve muy largo
La carrocería blanca de por sí no es muy llamativa, es verdad que el azul o el tono burdeos con el que se puede pintar este vehículo le daría más presencia, pero lo que destaca del Ford Explorer, es todo el cristal que tiene.
Las lunas, el techo, los laterales, todo ello redunda en una magnífica visibilidad de todos los flancos, y en una gran iluminación (no reñida con la oscuridad si el sol se vuelve molesto, gracias a sus diferentes tintados y cortinillas).
También el enorme tamaño de las puertas (que facilitan el acceso) y la gran distancia entre ejes nos remarcan ese tamaño descomunal.
Para dar un poco de contraste, en negro tenemos todos los marcos de las ventanas, pilares, bajos, pasos de ruedas y las barras del techo. Un conjunto muy uniforme que es elegante. Bajo esos amplios pasos de rueda se alojan unos neumáticos brutales 255/55 R20 110V con llantas de 20 pulgadas.
Trasera, diferente a todos
La trasera es bastante diferente a todas las de sus competidores. es más recta, con elementos como los faros LED propios de dos colores, el marcado alerón de techo en el que se integra la tercera luz de freno y por supuesto las llamativas cuatro salidas de escape cromadas.
Interior cómodo, con prácticamente de todo y muy, muy espacioso
Visto el exterior, pasamos al interior a través de unas puertas enormes. El habitáculo destaca por su amplitud, buen gusto en la elección de materiales y combinación de colores; te sientas y te invade el confort, la sensación de calidad transmitida es muy agradable al tacto con buenos ajustes, y la disposición de los diferentes elementos te facilita la vida.
Esa longitud de más de 5 metros y sobre todo la batalla de más de 3 metros, se nota en el interior, y vaya si se nota; tres filas de asientos, todas ellas aptas para adultos, y además dejando espacio para un más que correcto maletero.
Asientos delanteros
En los asientos delanteros el espacio es soberbio. Los asientos ofrecen buen agarre y un mullido adecuado para hacer muchos kilómetros.
Los asientos delanteros están hechos para disfrutarlos, no les falta de nada, a parte de su manejo eléctrico, incorporan función de masaje, configurable en la pantalla (esto hay que probarlo) aunque en su funcionamiento es algo ruidoso, calefacción para el invierno, ventilación para el verano, vamos que son una maravilla y además los cinturones de seguridad pueden regularse en altura.
El volante es ajustable también eléctricamente, lo que facilita mucho su posición perfecta, además tiene un buen grosor, lo que le hace muy fácil de manejo.
Tras el volante tenemos la instrumentación digital de 12,3 pulgadas. Muestra toda la información necesaria de manera clara e intuitiva, aunque apenas ofrece posibilidades de personalización más allá de su aspecto e información al seleccionar los diversos modos de conducción.
Todo queda al alcance de la mano y la botonería está bien agrupada, resultando sencillo hacerse con todos los mandos.
Muchas de las opciones del Explorer se controlan a través de la pantalla táctil (sorprendentemente vertical), aunque elementos como el climatizador o manejo de la radio, se hallan por debajo.
Sistema multimedia y parte central
En cuando al sistema multimedia, equipa una pantalla vertical con SYNC 3, navegador y sistema de sonido B&O. Es de sencillo y muy intuitivo, aunque es aconsejable primeramente tomarse unos minutos, para hacerse con todas las posibilidades que te da de manejo.
Una de las pegas a mi parecer de la colocación vertical de la pantalla es que para las cámaras tanto frontal como vertical, tan sólo se use una parte de la pantalla, una pena. Pero también tiene su lado positivo y es la posibilidad de tener pantalla dividida.
Bajo la pantalla una serie de botones que controlan el audio, la cámara de visión delantera, warning,.. y debajo, el climatizador. Por debajo se ubica una guantera de gran capacidad, con conexiones USB y de 12V que se puede ocultar.
Ya en la consola central dos mandos giratorios, uno de mayor tamaño, que es el del cambio automático, y otro más pequeño, que es el DRIVE MODE, del que os hablaremos más adelante.. Entre medias y alrededor, botones de freno de mano eléctrico, Sistema EV, botón de control de descensos, el de ayuda al aparcamiento,…
Al lado de estos botones, dos guanteras porta-botellas, con un pequeño espacio para monedas y seguido está el cargador inalámbrico de smartphone (en una posición inusual, vertical), que precede al reposabrazos fijo que incorpora una generosa guantera.
2ª fila de asientos
El acceso a estos asientos desde el exterior es cómodo, aunque por su altura hay a gente que no le gusta tanto; lo bueno, que incorpora unos agarradores que son muy útiles tanto para entrar como para salir del vehículo.
Los asientos son muy cómodos, totalmente independientes, van con climatizador y se puede inclinar el respaldo; las plazas exteriores son algo más amplias, se deslizan longitudinalmente 150 mm y ofrecen anclajes isoFix. Esta posibilidad de moverlos, viene perfecto si llevas a gente en la tercera fila de asientos, para configurarlos para una mayor comodidad.
Para que os hagáis una idea del confort en la segunda fila, incorpora cortinillas en las ventanas, salidas de aire orientables en el techo, calefacción en los asientos, tomas USB, y de 230V (con toma americana, necesitaremos adaptador), vamos que lo tiene todo.
Como colofón, el enorme techo panorámico de cristal corredizo con cortinilla eléctrica, ayuda mucho en la sensación de desahogo y de confort a bordo.
3ª fila de asientos
Pues aquí, en principio, los mejores probadores son los pequeños de la casa; aunque antes de que entraran probé su acceso y confort, y la verdad no es muy incómodo para entrar y salir aunque algo ágil hay que estar; eso sí, ayuda bastante que tienes donde agarrarte.
Una vez sentados, leche!!, son bastante cómodos, el mullido está muy bien, y si puedes configurar los asientos de la segunda fila, hay suficiente espacio para rodillas y de altura va sobrado. (Me han certificado después de 250 km, que se va bastante bien ahí detrás y la persona medía 1,78 cm)
Se trata de uno de los modelos de este segmento que mayor espacio ofrece en la tercera fila de asientos.
Y no vamos a pasar por alto, que además ofrece múltiples comodidades en estas plazas, con salidas de ventilación, posavasos, reposabrazos e iluminación. E incluso una toma de carga, aunque está en el maletero.
Para un manejo más sencillo de estos asientos, Ford ha colocado unos botones ubicados a la derecha del maletero para poder sacarlos u ocultarlos de manera independiente o a la vez.
Maletero
El maletero puede pasar de ser un maletero sencillamente correcto, con las 7 plazas habilitadas, a una inmensidad si abatimos todos los asientos, lo que traducido a cifras nos deja:
- En su configuración más pequeña: 240 litros
- Con cinco ocupantes: 635 litros
- Con las dos últimas filas abatidas: 2.274 litros y con toda la superficie de carga totalmente plana.
Además debajo del piso del maletero nos encontramos un hueco donde se ubican los cables de carga, las luces de emergencia, triángulos,…
Equipamiento
Respecto al equipamiento, el Ford Explorer sólo incorpora un nivel de equipamiento denominado STLine, que lo lleva absolutamente todo, y tan sólo podemos configurar el color exterior del vehículo.
Como hemos dicho, va equipado hasta arriba, no le falta de nada, faros Full LED, tapicería de cuero, climatizador de tres zonas, asientos delanteros eléctricos, calefactables y climatizados, cámara de 360º, cristales acústicos, acceso y arranque sin llave, nivel 2 de conducción autónoma,…
Respecto a la tecnología, instrumentación digital configurable con panel de 12,3 pulgadas, navegador, cargador inalámbrico para el teléfono móvil, sistema multimedia SYNC 3 con pantalla de 10,1 pulgadas, conexión wifi, equipo de sonido Bang&Oluffsen
Seguridad a bordo
En materia de seguridad al igual que pasa con el equipamiento no le falta de nada, conducción semiautónoma Co-Pilot 360, control de velocidad de crucero inteligente con función Stop&Go, sistema de frenada de emergencia automática, con detección de peatones y ciclistas, Control de descenso en pendientes, reconocimiento de señales de tráfico y aparcamiento automático Active Park Assist 2.
Bloque híbrido enchufable
El sistema de propulsión del Ford Explorer PHEV AWD está conformado por un motor turbo de gasolina 3.0 V6 EcoBoost, con 363 CV y 555 Nm, que trabaja asociado a un propulsor eléctrico de 100 CV, dispuesto también en posición delantera.
En conjunto, este esquema desarrolla 457 CV y nada menos que 825 Nm. El sistema de tracción total 4WD distribuye de forma variable la fuerza mecánica entre ambos ejes, aunque el coche canaliza toda la fuerza al tren trasero cuando no hay una necesidad extra de motricidad.
Este conjunto se nutre de la energía almacenada en una batería de 13,6 kWh de capacidad bruta, de los que 10,3 kWh son los que se utilizan en realidad. Y la encargada de enviar la potencia a ambos ejes es una caja de cambios automática de diez velocidades.
Transmisión Selectshift
Aunque pueda parecer un desacierto meter una transmisión de 10 velocidades por convertidor de par en un vehículo como este, es todo lo contrario, es un ACIERTO con mayúsculas.
La moderna transmisión automática Selectshift de 10 velocidades es la perfecta para quien vaya a usar el Ford Explorer en sus desplazamientos diarios.
Gracias a esta caja se mejoran las prestaciones y consigue una rebaja del consumo bastante notorio, y además se adapta a la perfección a los diferentes modos de conducción de los que dispone el vehículo.
Me gusta por su suavidad ademas de por la búsqueda de la eficiencia y que como puntazo, ofrece un programa secuencial a través de las levas situadas detrás del volante, que viene de lujo sobre todo en el modo deportivo.
Sistema PHEV y cifras oficiales
La batería es de iones de litio y cuenta con una capacidad de 13,6 KWh brutos (10,3 kWh netos). La autonomía oficial WLTP en modo 100% eléctrico es de 42 kilómetros, cifra a la que nos ha resultado fácil acercarnos.
Dependiendo del sistema de carga empleado:
- Recargar la batería en 5,8 horas con un enchufe estándar (2,3 kW)
- Recargar la batería en 4,3 horas con un Wallbox de 3,7 kW.
La potencia de recarga máxima en C.A. es de 3,6 kW y con el coche se entregan dos tipos de cables de carga, Schuko y Menekes.
El consumo homologado es de 3.1 l/100 km en WLTP.
Sensaciones dinámicas
En líneas generales es un vehículo enfocado para viajar; un interior muy cómodo con una insonorización muy buena y espacioso, para toda la familia e ir bien cargados.
Pero además posee otras cualidades que le permiten adentrarse por cualquier tipo de terreno y que supere las dificultades sin problemas.
Pero lo que más sorprende de este Ford Explorer es la fuerza que tiene, le pisas el acelerador y literalmente sale disparado; la cara de los ocupantes a esta aceleración sencillamente brutal, es de asombro y diversión.
Por supuesto, el Ford Explorer te deja elegir como conducirlo, tú eliges el camino, lo configuras y a disfrutar; siempre que haya carga en las baterías se puede conducir como un eléctrico puro pulsando el botón EV y en función de las necesidades puntuales, puedes utilizar los programas EV Later y EV Charge.
DRIVE MODE
Con esta rueda vamos a configurar nuestro Ford Explorer según van cambiando los terrenos por los que discurre nuestra ruta. Se trata de un mando giratorio situado entre los asientos delanteros, desde donde configuramos el vehículo. Los diferentes modos son:
- ECO
- Normal
- Deportivo
- OffRoad – Pista
- OffRoad – Resbaladizo
- OffRoad – Nieve
- Remolque
Como podéis leer y ver en las siguientes fotos, el Ford Explorer es totalmente configurable. La centralita ajusta el comportamiento de diferentes parámetros como la dirección, respuesta del acelerador, entrega del motor, velocidad de la transmisión; eso sí, sorprendentemente la suspensión no sufre modificaciones.
Nos ponemos en marcha
Y lo hacemos con las baterías bien cargadas. Pulsamos modo EV dispuestos a exprimir esa bater´ía y ver hasta dónde llega su autonomía en modo 0 emisiones. Se trata de una ruta por carretera, bien asfaltada entre localidades, subidas, bajadas, largas rectas,…
En modo EV, sobre los 45 km que me daba de carga máxima, hemos logrado hacer 39 km. Sobresaliente.
Añadir a estos datos, que una vez hemos finalizado todas las pruebas y después de haber recargado la batería del Explorer dos veces (es decir hemos gastado 2 cargas completas – 90 km de autonomía), en el display del vehículo una vez terminada la prueba, nos indica que hemos circulado en modo 0 emisiones 158 km, una cifra muy a tener en cuenta.
El Explorer en cuanto tiene las baterías más o menos cargadas tiende a funcionar en eléctrico y eso se agradece
En autovías, es un placer
La sensación de bienestar, comodidad, amplitud, son cualidades que resaltan en nuestro Ford Explorer. Tanto si vas de conductor, como si tienes la suerte de ir de pasajero, se nota el gran trabajo para dotar a este coche de cualidades de una berlina premium, pero dentro de una carcasa SUV.
La comodidad a bordo, la insonorización, la calidad de rodadura, las suspensiones,… todo en este Explorer va enfocado al confort.
Y encima dinámicamente, el Explorer va de lujo. Es un vehículo que a altas velocidades transmite sensación de seguridad y aplomo incluso en curvas el balanceo es mínimo; eso sí, como te despistes, la velocidad puede dispararse (por eso en control de velocidad es recomedable)
Por carretera
A partir de consumir por completo las baterías, el Ford Explorer funciona en modo híbrido, ello conlleva el funcionamiento del potente motor de gasolina, y cuando las baterías lo permiten, ir en modo 0 emisiones.
Después de algo más de 200 km por carretera, el ordenador de a bordo nos marca una media de 8,7 L/100 km, conduciendo sin miramientos, datos que prueban la eficiencia tan lograda en este vehículo.
Que el vehículo pese cerca de 2,5 toneladas, no le resta respuesta y energía, el bloque motor de 457 CV de potencia sorprende por lo enérgica de la respuesta; es rápido al adelantar o incorporarnos a una vía.
Se porta con nobleza, puede tirar un poco para atrás su tamaño, pero responde muy bien a lo que se pide; las suspensiones funcionan a la perfección, tanto en firmeza como en absorción de irregularidades; la dirección es precisa y los frenos literalmente “clavan” el Explorer.
Aunque si vamos un poco fuertes, en curvas es mejor frenar el vehículo antes de entrar, para que vaya por la línea, porque si apuramos, el balanceo al forzar la entrada puede asustar.
La ciudad, visita breve, aunque sin limitaciones
En ciudad, la verdad es que lo hemos usado más bien poco, porque su tamaño no invita a aventurarse por las calles de una gran ciudad. Aunque portando la etiqueta 0 emisiones, podemos circular por cualquier sitio.
Los aparcamientos en batería son casi imposibles sino se mete el vehículo “de culo” porque esos más de 5 metros no ayudan, además la anchura del vehículo tampoco facilita mucho; pero si encontramos sitio, aparcar es muy sencillo gracias a las cámaras, sensores y sistemas de ayuda al aparcamiento.
Y recordar, la Etiqueta CERO de la DGT, nos permite aparcar, al menos en Madrid GRATIS todo el tiempo que queramos en zona SER verde o azul y circular por la almendra central.
Por el campo, tú pones el límite
Y es que gracias al DRIVE MODE y la multitud de sistemas de ayuda y el sistema de tracción integral AWD, el Ford Explorer se puede aventurar por cualquier terreno por difíciles condiciones que tenga.
Lo hemos probado en pista de tierra, por terrenos pedregosos, sobre resbaladizo (hierba mojada) en ascenso, en descenso, y el vehículo se ha comportado a la perfección, proporcionando siempre un agarre extraordinario y dando mucha confianza y seguridad en lo que estábamos haciendo.
Consumos
En el trayecto donde pudimos mezclar la conducción EV con la conducción con el motor de combustión, el ordenador de a bordo nos marcó una media de 5,8 l/100 km. Con las baterías totalmente descargadas en una conducción por carreteras y ciudad, y saltando el modo EV de vez en cuando el ordenador nos marcaba 8,7 l/100 km.
Resúmen
El Ford Explorer es claramente un vehículo muy para gente que le guste el campo y lo visite regularmente con la familia. Es cierto que no es un vehículo asequible, pero en relación nivel de equipamiento / prestaciones / precio, puede que esté entre los 3 mejores del mercado actualmente.
Y si estás en la duda, recuerda que además con el Ford Explorer, tienes permitido entrar en cualquier ciudad, en cualquier escenario de contaminación, aparcar en la mayoría gratis, reducciones de impuestos del vehículo,… tuya es la elección.