A prueba el nuevo SsangYong Tívoli práctico y muy asequible
Por nuestras manos ha pasado esta semana el renovado SsangYong Tívoli, un reestyling del modelo 2020, que viene dispuesto a hacerse un hueco en su segmento.
Con unas medidas de 4,22 m de largo 1,81 m de ancho, 1,61 m de alto, una distancia entre ejes de 2,60 m y una distancia libre al suelo de 178 mm, el nuevo SsangYong Tívoli es una alternativa muy a tener en cuenta frente al SEAT Arona el superventas del segmento.
Aunque le corresponde la etiqueta C de la DGT, si queremos la etiqueta ECO se puede comprar el coche con la adaptación a GLP. Esta preparación de fábrica, y supone un plus de calidad, además con una garantía de marca de 5 años o 100.000 km.
Precios
SsangYong Tívoli Line 163 CV | 20.900 euros |
SsangYong Tívoli Urban Plus 163 CV | 24.200 euros |
SsangYong Tívoli Limited 163 CV | 27.200 euros |
SsangYong Tívoli Urban Plus Aut. 163 CV | 25.700 euros |
SsangYong Tívoli Limited Aut. 163 CV | 28.700 euros |
Precios GLP
SsangYong Tívoli Line 163 CV 4×2 | 23.650 euros |
SsangYong Tívoli Urban Plus 163 CV 4×2 | 26.950 euros |
SsangYong Tívoli Urban Plus 163 CV 4×2 Aut. | 28.450 euros |
SsangYong Tívoli Limited 163 CV 4×2 | 29.950 euros |
SsangYong Tívoli Limited 163 CV 4×2 Aut. | 31.450 euros |
Diseño exterior con leves cambios visibles
El cambio más visible del exterior lo vemos en el frontal, tiene mucha más presencia, con un nuevo parachoques integrado y una parrilla de forma trapezoidal más grande, al lado con el detalle en rojo heredado del Torres y una nueva forma de los antiniebla triples (tipo LED). Además, se le han añadido tres llamativos detalles a color y desaparece el logo de la marca (recordar que en breve pasará a llamarse KG) en favor de la denominación del modelo, Tivoli.
El lateral se mantiene inalterable, un vehículo un poco alto, con la nomenclatura del motor a mabos lados, pasos de rueda y bajos con protección de plástico en color negro y llantas de 16” o 18” con diseño de diamante.
La trasera es la parte que menos nos gusta del exterior, con una apariencia demasiado bruta, esos pasos de rueda excesivamente sobredimensionados y esos enormes faros le dan un aspecto que no termina de entrarnos, y no encajan con con su diseño delantero. La luz antiniebla está situada en el centro del alerón y desparecen tanto el logo como el nombre de la marca, quedando sólo el del modelo.
Interior práctico y espacioso
Nada más entrar al SsangYong Tívoli saltan a la vista las mejoras en el habitáculo. Es amplio y práctico, con materiales más agradables al tacto y buenos ajustes que dan un resultado general muy bueno.
Nuevo salpicadero con salidas de aire en los extremos, nuevo volante más cómodo y de mejor agarre, nuevo cuadro de instrumentos digital de 10,25 pulgadas totalmente personalizable (solo disponible en el acabado Limited) y sistema multimedia de 8” con pantalla táctil compatible con Apple Car Play y Android Auto. Por debajo, los mandos de la climatización, que ya no son físicos, pero que están siempre visibles.
Mucha habitabilidad
El acceso al interior es perfecto con una gran apertura de las puertas, aunque bien es cierto que los pasos de ruedas tan grandes de las ruedas traseras pueden molestar si estamos pegados a otros coches. Una vez dentro se nota la gran habitabilidad de la que presume este Tívoli.
Los asientos delanteros son cómodos, con un puesto de conducción con todo a mano, aunque me hubiera gustado poder colocar el volante en profundidad; éste presenta un diseño muy funcional.
Las plazas traseras tienen un buen acceso y a gracias a que el Tívoli está ligeramente elevado, la colocación de sillas para los más pequeños, o el acceso de personas mayores, se hace de manera muy sencilla. Los asientos son algo duros (sobre todo el central) pero no incómodos.
Perfecto para 2, aunque 3 adultos pueden viajar en estas plazas traseras: a destacar una gran altura y el espacio más que de sobra para las rodillas, (tiene la mayor distancia entre filas del segmento con 800 mm). Incluso la plaza central, que en otros competidores es meramente testimonial, en este SsangYong Tívoli, tiene a su favor la casi ausencia de túnel central.
Maletero
El maletero presenta un volumen de 427 litros, que se puede ampliar abatiendo los respaldos de las plazas traseras (en proporción 40/60) para lograr una mayor modularidad, hasta los 1.115 litros. Aquí tenemos la posibilidad de sustituir la rueda de repuesto por el depósito de gas.
Equipamiento
El SsangYong Tívoli se presenta en 3 acabados, Line, Urban Plus y Limited.
El acabado Line es el más sencillo pero incluye cuadro de instrumentación digital, climatizador, retrovisores eléctricos, faros LED y todo el sistema de seguridad activa y pasiva del resto de la gama.
El acabado Limited, el tope de gama, incluye equipo de infoentretenimiento con pantalla de 8” y ayudas a la conducción como el aviso de cambio de carril, control de crucero adaptativo, asistente a la frenada de emergencia y aviso de posible colisión.
Seguridad a bordo
Todos los acabados disponibles incluyen el Sistema Avanzado de Seguridad SsangYong (SASS) compuesto por la frenada automática de emergencia, la alerta de salida de carril, el asistente de mantenimiento de carril, el reconocimiento de señales, el aviso de avance del vehículo delantero, la advertencia de fatiga, la alerta de distancia de seguridad, la ayuda al arranque en pendiente y el control de descenso.
Motorizaciones
El nuevo ssangYong Tívoli monta un único motor de gasolina sobrealimentado 1.5 GDi-T en dos potencias, de 135 CV y 280 Nm de par asociado a un cambio manual de 6 velocidades. O de 163 CV de potencia asociado a una caja de cambios manual de seis velocidades de serie u opcionalmente una automática de 6 velocidades AISIN.
Dinámica
Por nuestras manos ha pasado la motorización de 163 CV y cambio automático; un cambio suave, enfocado principalmente a la eficiencia. Un bloque que mueve de manera ágil el vehículo, con un perfecto equilibrio entre prestaciones y eficiencia, con tres modos de conducción: Comfort, Normal y Sport.
El modo Comfort, enfocado para ciudad; maniobras y giros muy rápidos, con una dirección precisa y rápida; el motor es perfecto para este ambiente por su eficiencia; el Tívoli se desenvuelve como pez en el agua.
El modo Normal es más para circular por autopista/autovías. El nuevo Tívoli tiene un buen confort de marcha, con una insonorización a bordo bastante buena y unas suspensiones (un poco duras para mi gusto) que conservan el esquema McPherson en el tren delantero y un eje de torsión detrás.
Con el modo Sport no hay que esperar un comportamiento deportivo, ya que no está preparado para ello, ni pretende serlo. La dirección adquiere un tacto más firme, pero la respuesta motor sigue siendo progresiva y sí apretamos a fondo el acelerador, sí que notaremos algo más de fuerza, pero sobre todo, ruido motor.
Por si te da por probarlo en curvas, decir que, si vas fuerte, tiende a balancear, aparecen inercias y en las salidas de curvas hay que ir con tiento si aceleramos fuerte. No es un vehículo para este tipo de conducción, pero sin embargo, si lo haces tranquilo, el vehículo enlaza muy bien, y apenas notaremos en el cuerpo los giros.
Respecto a los consumos del Tívoli la media de nuestra ruta se ha parado en 7 l/100 km. Una cifra más que correcta.
GLP
La versión bifuel, de gasolina y GLP le permite lucir la etiqueta ECO de la DGT, y se presenta como una alternativa debido al bajo mas barato del GLP con respecto a otros combustibles.
Pros
- Puedes ahorrar hasta un 40% en combustible.
- Los vehículos con GLP reciben la pegatina ECO.
- Puede circular por el centro de las ciudades en episodios de alta contaminación.
- Hasta un 50% de descuento en zonas de estacionamiento regulado.
- Hasta un 75 % de bonificación en el impuesto de circulación.
- Exentos de pagar el impuesto de matriculación.
Contras
- 2.750 euros de sobrecoste.
- El depósito de GLP quita espacio al maletero y aumenta el peso del vehículo.
- No todas las estaciones de servicio cuentan con surtidor.
Conclusiones
Con la actualización estética que recibe el Ssangyong Tívoli, la firma coreana se mete a saco, en el segmento de los SUV compactos. Y además lo hace con unos precios realmente de derribo. Además tienes la posibilidad de convertirlo de fábrica a GLP, lo que te da automáticamente la etiqueta ECO de la DGT y todas las ventajas que ello supone. ¿Es para pensárselo seriamente, o no?