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Toyota Motor Corporation y NTT Corporation han anunciado que han llegado a un acuerdo cuyo objetivo es establecer una relación de colaboración continua a largo plazo que haga posible la comercialización de negocios relacionados con las ciudades inteligentes.
Las dos compañías desarrollarán conjuntamente una plataforma de ciudades inteligentes, que les añadirá valor en todos los ámbitos, desde lo relativo a las personas hasta los vehículos y hogares, pasando por empresas, infraestructuras y servicios públicos destinados a los residentes, empresas, gobiernos locales, etc.
En primer lugar, se implantará en la Woven City –ciudad entrelazada– de Toyota (Susono City, prefectura de Shizuoka, Japón), que se construirá a partir de 2021.
1. Adopción del planteamiento de ‘el software primero’
El concepto de ‘el software primero’, en el que el hardware y el software van por separado y el software se desarrolla y se implanta antes, ha ido gozando de cada vez más aceptación.
Los sistemas operativos y aplicaciones pueden ampliar las funciones de los smartphones mediante actualizaciones mientras sigue usando el mismo hardware.
En lo relativo a la fabricación de automóviles, la capacidad de plantear rediseños parciales, como la más reciente actualización de software asociada a las funciones avanzadas de asistencia a la conducción, en lugar de rediseños completos, como cuando los clientes sustituyen su coche por uno nuevo, permitirá a Toyota aprovechar plenamente las fortalezas de su hardware; esto es, la durabilidad, la facilidad de acceso a repuestos y la facilidad de reparación.
2. Los vehículos como parte del sistema social
Con el avance de la conectividad y del Internet de las cosas, los vehículos dejarán de ser meros objetos de propiedad personal o simples medios de transporte.
Se convertirán en elementos estructurales del propio sistema social. El papel que deben desempeñar los automóviles está empezando a cambiar.
El concepto de conectar los vehículos y los hogares con las comunidades en que viven las personas es la piedra angular para la creación de una plataforma de ciudad y de la alianza entre Toyota y NTT.
Desde el momento en que se reinventó totalmente como empresa para pasar de fabricar telares a producir automóviles, en la base de Toyota destaca un potente anhelo por contribuir a la prosperidad de la sociedad y el deseo de repartir felicidad entre todas las personas mediante el esfuerzo de la compañía para crear vehículos que todo el mundo pueda tener y conducir.
A la hora de plantearse y crear la sociedad del futuro, se requiere una gran cantidad de energía.
En este periodo de profunda transformación, en el que resulta complicado saber lo que nos depara el futuro y teniendo en cuenta que aún quedan muchas preguntas sin respuesta, es importante que las empresas privadas con voluntad de hacer algo por su país se pongan en acción armadas de las capacidades tecnológicas y del talento humano necesarios para construir el futuro.
