Renting: la nueva modalidad de alquiler de vehículos y sus ventajas
Este sistema de alquiler incluye todos los gastos del proceso de compra, como los impuestos de matriculación, el seguro, los gastos de mantenimiento, las revisiones y la sustitución de neumáticos
El renting es un contrato de alquiler de un vehículo por un período determinado de tiempo, es decir, el cliente no es el propietario del coche, sino que paga una cuota fija mensual por el uso de un bien. Los periodos de contratación suelen ser de 36, 48 o 60 meses, durante los cuales el coche pertenece a la empresa o particular que haya arrendado dicho vehículo. Este sistema de alquiler incluye todos los gastos del proceso de compra, como los impuestos de matriculación, el seguro, los gastos de mantenimiento, las revisiones y la sustitución de neumáticos.
Esta modalidad de arrendamiento no incluye el reportaje de combustible, las posibles multas del usuario y las reparaciones de averías que se produzcan por un mal uso del vehículo. La duración del contrato de renting suele ser de uno a cinco años y, al finalizar ese plazo, el cliente debe devolver el coche. Una de las grandes ventajas es que en la mayoría de los casos es posible contratar un vehículo de renting sin pagar entrada.
No debemos confundir el término “renting” con el “leasing”, ya que ambas opciones tienen en común el pago de una cuota fija todos los meses mientras dure el contrato. Sin embargo, el leasing es una modalidad de alquiler de vehículos por un período más duradero en el tiempo. Este tipo de contratos suele ser mínimo de dos años, en los que es obligatorio pagar una entrada y al finalizar el plazo se puede comprar el bien pagando una determinada cantidad de dinero.
La gran diferencia entre las dos modalidades de arrendamiento es que el leasing está orientado a empresas exclusivamente, mientras que el renting está dirigido tanto para empresas como a particulares. Además, el leasing incluye la opción de comprar el bien al final del contrato, en cambio, en la opción de renting se alquila un vehículo por un período de tiempo determinado, que no suele ser superior a cinco años.
En esta entrada te diremos cuáles son las ventajas del renting de vehículos:
- Una de las principales ventajas de este tipo de arrendamiento es la comodidad de los servicios que ofrece, ya que en la cuota fija de renting se incluyen los gastos por las labores administrativas de matriculación del vehículo, el mantenimiento preventivo mecánico del coche, reparaciones de posibles averías, seguro a todo riesgo y sin franquicia, asistencia en carretera y cambio de neumáticos.
- Si utilizas esta opción de arrendamiento de bienes podrás renovar tu coche cada pocos años, por lo que siempre disfrutarás de vehículos modernos de última generación. Estos, al estar más actualizados, serán más respetuosos con el medio ambiente y serán más ecológicos.
- Otra ventaja significativa es que en la mayoría de los casos es posible contratar un vehículo de renting sin pagar entrada. Esto permite que los autónomos o los particulares puedan disponer de un coche de manera flexible, abonando una cuota fija que incluye todas las coberturas y servicios. En el contrato de alquiler debe quedar reflejado el tiempo de uso del vehículo, el kilometraje máximo y el coste mensual.
- En cuanto a las empresas, el renting les beneficia en gran medida debido a que ofrece ventajas fiscales porque el alquiler se considera como un gasto y no como una inversión. Además, al ser una cuota fija que no varía, la empresa podrá controlar mejor sus gastos de tesorería. La imagen de las empresas frente a los clientes es muy importante, por lo que podrán utilizar el renting como una forma de renovar de forma asidua su flota de vehículos.
- Es la mejor solución si quieres disponer de un coche con la libertad de poder cambiarlo cada poco tiempo. Con esta modalidad de alquiler no tendrás las ataduras ni el compromiso que conlleva la propiedad de un vehículo.