Prueba Mercedes-Benz GLB para todo y para todos
Esta semana nos ponemos al volante del Mercedes-Benz GLB el perfecto ejemplo de vehículo que vale absolutamente para todo y y es perfecto para todos.
Se posiciona dentro del segmento de los SUV compacto, aunque por sus características no tiene rival, al menos en el segmento premium. Para encontrar rivales por tamaño nos tendríamos que ir a SUV tipo Ford Kuga o Toyota RAV-4 (prueba).
El GLB es el primer modelo compacto de Mercedes-Benz con capacidad para 7 plazas pese a utilizar la misma plataforma que el GLA o el Clase B. Ofrece mayores dimensiones con 4630 mm de longitud, 1834 mm de anchura, 1659 mm de altura, y una batalla de 2829 mm.
Precios
Mercedes-Benz GLB 180 | 41.599,51 euros |
Mercedes-Benz GLB 200 | 44.725,42 euros |
Mercedes-Benz GLB 200 d | 45.061,26 euros |
Mercedes-Benz GLB 200 d 4MATIC | 47.489,64 euros |
Mercedes-Benz GLB 220 d 4MATIC | 49.633,87 euros |
Mercedes-Benz GLB 250 4MATIC | 57.802,94 euros |
Mercedes-AMG GLB 35 4MATIC | 73.199,69 euros |
Diseño exterior
A primera vista nos encontramos con un SUV imponente, con una altura bastante marcada y un frontal robusto que incorpora faros LED High Performance de serie (MULTIBEAM LED en opción que incorporaba nuestra unidad).
Las ópticas delanteras lucen un diseño cuadrado y luces de circulación diurna doble, además en este frontal incorpora una estrella en el centro de la parrilla de gran tamaño.
En el lateral es donde más se ve el ADN de la Clase G de Mercedes-Benz, formas cuadradas a la vez que redondeadas en sus extremos para darle un aspecto más moderno; los cortos voladizos delanteros y traseros, y una gran batalla se traducen en un espacio interior sobresaliente.
En la trasera nos encontramos con un portón trasero muy vertical, alejado de los diseños actuales, de aspecto familiar y que le da esa habitabilidad de 7 plazas.
Además visto desde atrás, los marcados pasos de rueda, la doble salida de escape y el llamativo difusor trasero transmiten una sensación de aplomo y seguridad a la par que deportivo.
Interior de gran habitabilidad
La disposición interior de las pantallas, volante… es muy parecido a una reciente prueba, la del Mercedes-Benz EQA (prueba) que tuvimos hace unas semanas.
Un interior de gran calidad con materiales excelentes, ajustes que aseguran una durabilidad eterna y un equipamiento tecnológico sin rival.
El habitáculo es sencillo y funcional; todos los elementos están a mano, aunque algunos de ellos, como los del volante, con botones capacitativos, hasta que nos familiarizamos, distraen en su manejo.
Combina materiales de piel en las puertas con pespunte de hilo rojo o incluso el alcántara de los paneles interiores, dándole un aspecto deportivo.
Primera fila de asientos
Asientos muy cómodos, que agarran muy bien el cuerpo y con una regulación total a través de unos mandos ubicados en las puertas, y con posibilidad de mejorar el confort a través del menú en la pantalla. El sistema ENERGIZING confort, configura los asientos según el trayecto que vayamos a realizar.
Segunda fila de asientos, nivel 10 de comodidad
Para empezar, decir que está segunda fila de asientos cuenta con unos 15 cm de regulación longitudinal, lo que nos ha permitido configurar el interior en función de las plazas ocupadas. En su posición normal, tiene una gran distancia para las piernas de los pasajeros (967 mm), en altura y en hombros.
Tercera fila de asientos, pionera en el segmento
Pasamos a la tercera fila de asientos, que aunque no son decorativas, si es verdad que son para usar en momentos puntuales o para ubicar ahí a los más pequeños.
El acceso a esta tercera fila, es más cómodo de lo que podría parecer, ya que podemos abatir los asientos de la segunda fila y echarlos para adelante. El problema radica en los cinturones de esta tercera fila, que es fácil que dificulten plegar los asientos.
Los asientos son abatibles por separado y quedan a ras con el piso del maletero al plegarse.
En esta tercera fila de asientos podemos encontrar cargadores USB de tipo C, que nos va a permitir llevar bastante distraídos a estos pequeños de la casa.
La tercera fila de asientos se puede usar para sillas infantiles con anclajes Isofix, o para acomodar niños. Los adultos tendrán dos problemas: poca altura al techo y una posición muy forzada de rodillas, ya que la banqueta está muy baja respecto al suelo.
Maletero de gran capacidad
El volumen del maletero del Mercedes-Benz GLB oscila, entre los 570 y los 1.805 litros, dependiendo de la configuración de asientos que llevemos.
Con las 7 plazas disponibles el maletero es testimonial, con los asientos de la segunda fila en su posición normal y ocultos los de la tercera fila, es de 570 litros, pudiendo llegar a los 770 litros si adelantamos al tope los asientos de la segunda fila.
Y por último si abatimos los asientos de la segunda fila también, el espacio de carga aumenta hasta los citados 1.805 litros de capacidad.
Equipamiento
El equipamiento de serie es bastante completo y se completa con diferentes packs que Mercedes pone a disposición de los clientes.
Uno de ellos es el paquete premium que incorpora, sensores de parking, asistente activo de aparcamiento, retrovisores antideslumbramiento, asientos calefactados o instrumentación digital y pantalla multimedia con navegador de 10,25” entre otros.
Salpicadero con un protagonista, el sistema MBUX
El personaje principal y más destacado del interior, el sistema de infoentretenimiento MBUX con sus dos grandes pantallas, disponibles en tamaños de 7,25 o 10,25” (nuestra unidad montaba las de 10,25 pulgadas)
La capacidad de aprender gracias a la inteligencia artificial, hace que el sistema MBUX pueda personalizarse. Muy accesible, conectado e intuitivo gracias sobre todo al sistema de reconocimiento de voz natural (sin rival en ninguna marca)
Bloque motor
La oferta de motores del Mercedes-Benz GLB abarca tres propulsores gasolina y cuatro diésel. Nuestra unidad de pruebas tenía el propulsor de acceso a la gama diésel, el 200d.
Un bloque de 4 cilindros con 150 CV de potencia, asociado a una caja de cambios automática de doble embrague de 8 velocidades y con tracción total inteligente 4MATIC.
El bloque es de origen Renault-Nissan, aunque está afinado por los ingenieros de Mercedes-Benz.
Es de mayor potencia (+11%) que la anterior generación y puede desactivar dos cilindros en aquellas situaciones de baja carga de trabajo. Lo hace de manera imperceptible y los consumos se reducen significativamente.
Diésel rodador de gran confort
Por lo que respecta al comportamiento general del GLB hay que decir que tiene un enfoque claro al confort de marcha; me encanta este propulsor diésel, es silencioso, económico, de buen rendimiento y para este tipo de coches, es perfecto.
Su aceleración es progresiva, pero cuando se necesita fuerza, basta con apretar el acelerador, y el cambio y el motor, se complementan a la perfección e impulsan el GLB sin miramientos.
En ciudad a pesar de su tamaño se mueve ágil y la posición elevada de conducción nos hace tener todo controlado. Las diferentes ayudas que incorpora facilitan su manejo. Además como tiene 7 plazas puedes llevar a todo el mundo de una tirada de un sitio para otro (benditos cumpleaños).
Por carreteras y autopistas
Presenta diferentes modos de conducción en función de donde nos encontremos; estos modos, varían desde la respuesta del motor, la precisión de la dirección, o la dureza de la suspensión, pudiendo hacerlo de manera totalmente personal, si elegimos el modo personalizable.
Por autopista es un vehículo muy noble y el confort se nota desde casi el arranque. Devora kilómetros sin pestañear y apenas pesan en el cuerpo. Un cambio muy suave, una insonorización excelente, lo tiene todo para que ir realmente a gusto.
Por carretera se desenvuelve con bastante soltura, creía que la altura y formas le iban a pesar en el comportamiento, pero nada de eso. No es para ir fuerte, va muy bien en tramos de curvas aunque tiende a balancear ligeramente, pero sin ir muy «a saco» entra y sale de las curvas sin miramientos, de manera precisa y sin sustos.
La dirección precisa y la potencia del GLB hacen el resto. Si queremos salir fuerte, pisamos a fondo, el vehículo baja un par de marchas y acelera a base de bien, se vuelve más ruidoso, pero sale realmente fuerte. Los frenos también son muy precisos, y en frenadas enérgicas son muy eficaces.
Conducción off-road Mercedes-Benz GLB
Con el Mercedes-Benz GLB se pueden hacer incursiones fuera de carretera sin problema, ya que entre la altura libre al suelo (20 cm) y la tracción total 4MATIC (reparte el par al 50% entre los dos ejes) te permite pasar por encima de muchos obstáculos y transitar por caminos no aptos para otros.
Además incorpora el sistema de control de descensos, que te permite llevar el vehículo totalmente controlado aunque sea una bajada muy empinada.
Consumos
Nuestra prueba se dividió en dos partes bien diferenciadas, para ver los consumos en las diferentes situaciones. Mientras circulamos por autopista/autovía el consumo de media fue de 5,9 l/100 km, una auténtica barbaridad de dato. Esto nos hacía una cifra cercana a los 900 km autonomía y en estos tiempos con el combustible por las nubes, le hace muy apetecible.
La segunda parte de la prueba con una ruta más de carretera, con fuertes aceleraciones, frenadas, puertos,.. y metiéndonos un poco por el campo, la media subió cerca de los 9,7 L/100 km.
Lo que nos ha dado una media total de 7,8 L/100 km, aun así una cifra excelente para un vehículo de esas dimensiones y con ese motor.
Conclusiones
El Mercedes-Benz GLB es un coche para todo y para todos, un 9,5 en todos los aspectos.
En ciudad es sencillo y cómodo de manejar. Para los viajes, el propulsor diésel es ahorrador y las suspensiones lo hacen taaannnn cómodo en el interior que apenas se notan los kilómetros.
Sus diferentes sistemas de ayudas a la conducción y el sistema de tracción 4MATIC te dan un plus de seguridad en cualquier situación incluso en escapadas off-road.
Además la habitabilidad hasta 7 plazas, el sistema MBUX y que es un Mercedes,… ¿Qué más se le puede pedir a un SUV?