Opel Insignia GSi un sedán deportivo muy especial
Más emocional, más preciso, incluso más eficiente, el nuevo Opel Insignia GSi es un sedán deportivo para aquellos que gustan de algo especial. Un coche para que el conductor disfrute al máximo en todo tipo de carreteras. El chasis con su configuración dinámica y elevado nivel de agarre, combinado con la tracción integral, garantiza una experiencia de conducción gratificante, así como la máxima seguridad. La nueva transmisión automática de ocho velocidades se puede operar a través de las levas de cambio en el volante – como en un coche de carreras – para una experiencia de conducción aún más activa. Característica de la nueva generación de Insignia es la combinación de diseño ligero, bajo centro de gravedad y la potencia del motor de 2.0 litros turbo. El resultado es un equilibrio excelente y una excelente relación peso / potencia.
Estos valores internos merecen una imagen exterior especial. Con grandes tomas de aire cromadas en la parte delantera y un eficiente alerón trasero para la carga aerodinámica necesaria en el eje trasero, la imagen del GSi coincide perfectamente con su rendimiento. Los asientos deportivos tapizados en piel, especialmente desarrollados para el GSi, el volante deportivo de cuero y los pedales de aluminio añaden los toques finales.
Las capacidades deportivas del Insignia GSi coinciden con su diseño, tecnología punta y accesorios. Encabeza la lista los nuevos asientos deportivos desarrollados por Opel, que proporcionan un mayor soporte lateral, así como confort en largas distancias. Los asientos deportivos premium están certificados por AGR (Aktion Gesunder Rücken e.V. – Campaña para las Espaldas más saludables) y por lo tanto son ergonómicamente ideales. Al igual que el Insignia Grand Sport, ofrecen ventilación, calefacción, masaje y laterales ajustables.
En el GSi el elevado respaldo también cuenta con un reposacabezas integrado. El posicionamiento del cinturón de seguridad a la altura del hombro es ideal, algo poco habitual en los asientos deportivos. El cliente puede elegir entre dos combinaciones de cuero, cada una decorado con un emblema GSi.
El logotipo también adorna con orgullo la parte trasera del coche, que lleva un spoiler eficiente para la carga aerodinámica necesaria en el eje trasero. El faldón trasero parece un difusor y cuenta con dos tubos de escape cromados. De forma similar, las entradas de aire cromadas están situadas delante de los pasos de rueda delanteros. Los aficionados también apreciarán el ambiente apropiado en el interior, como en la parte inferior aplanada del volante en cuero, los pedales de aluminio y el techo negro – en el mejor estilo de un sedán deportivo muy especial.
En el “Infierno Verde”: la pista de carreras más dura del mundo
La puesta a punto final del Insignia GSi se realizó en el legendario Nürburgring-Nordschleife. Los ingenieros de Opel han desarrollado un chasis completamente nuevo para el GSi en Nürburgring, el famoso “Infierno Verde” como lo define Jackie Stewart. Los muelles más cortos bajan el GSi 10 mm y los amortiguadores deportivos especiales reducen los movimientos de la carrocería al mínimo. Los poderosos frenos Brembo de cuatro pistones (diámetro 345 mm) y la dirección directa se han adaptado en consecuencia.
El Insignia GSi está equipado de serie con el chasis FlexRide mecatrónico. Adapta los amortiguadores y la dirección en fracciones de un segundo; la centralita también cambia la calibración del pedal del acelerador y los puntos de cambio de la caja automática de ocho velocidades. El conductor puede elegir entre los modos “Standard”, “Tour” y “Sport”. Sujeto al modo elegido, la dirección y la respuesta del acelerador puedes ser aún más directa. Exclusivo para el GSi es el modo “Competición”, que se activa a través del botón ESP. Una doble pulsación permite a los pilotos más habilidosos encender y apagar el control de tracción.
El chasis deportivo, desarrollado en combinación con los neumáticos del alta prestación Michelin Pilot Sport 4 S y las grandes llantas de 20″, ofrecen niveles de agarre “casi como una lapa”. Una contribución importante proviene de la tracción integral con reparto vectorial del par incorporado de serie, única en este segmento. Este sistema de alta tecnología, sustituye un diferencial convencional en el eje trasero por dos embragues que pueden acelerar cada rueda trasera individualmente en fracciones de segundo, dependiendo de la situación de conducción. El molesto subviraje, en el que las ruedas delanteras empujan hacia el exterior de la curva, por tanto, queda casi desterrado del Insignia GSi. En otras palabras, el GSi toma la trazada correcta en cada curva.
El nuevo sedán deportivo de Opel está propulsado por un impresionante motor turbo de gasolina que combina la eficiencia de combustible con el rendimiento. El potente 2.0 litros turbo genera 260 CV de potencia y un par de 400 Nm; el consumo se cifra en 11,2 l/100 km urbano, 7,1 l / 100 km extra urbana, 8,6 l / 100 km combinado, 197 G / km de CO2. Todos se combina con una nueva transmisión automática de ocho velocidades. El conductor tiene la opción de cambiar de marcha a través de levas en el volante.
20-07-2017\\ José Ruiz Moreno