MIGUEL MOLINA ACABA LA TEMPORADA EN SHANGAI

El campeonato DTM 2010 está a las puertas de su desenlace, que tendrá lugar este próximo fin de semana en la ciudad china de Shanghai, en un circuito urbano de nueva concepción. Miguel Molina espera sacar partido del hecho de que todos los participantes saldrán en igualdad de condiciones, ya que nadie ha corrido antes allí.

China se está convirtiendo en uno de los mercados mundiales más importantes para la automoción, y en los primeros diez meses del año 2010, Audi ha incrementado sus ventas en dicho país en un 55 %, convirtiéndose en el mejor mercado de la marca, por delante incluso de Alemania. Es por ello que las marcas participantes en el DTM ven con buenos ojos extender el campeonato en el que participan hacia uno de sus principales mercados, corriendo en China como ya se hizo en 2004, aunque entonces la carrera no fue puntuable.

Audi correrá esta carrera sin la presión de pensar en el campeonato, y espera llevar a cabo una buena actuación que le permita cerrar el año repitiendo el triunfo conseguido en la pasada carrera de Adria. Allí Timo Scheider logró la victoria tras una espectacular remontada, ya que salió en 15 posición.

El hecho de correr en un circuito desconocido ofrece unas especiales condiciones, ya que como opina el Dr. Wolfgang Ullrich, Director de Audi Sport, «las cartas serán barajadas de nuevo. Nuestros rivales tendrán la presión de decidir el título entre ellos, mientras nosotros podremos ir libremente a por el triunfo. Sería bonito conseguirlo en China, un país tan importante para Audi».

Miguel Molina marchó hacia China ayer lunes, como la mayoría de sus compañeros, con la intención de poder adaptarse al cambio horario y a familiarizarse con la singularidad de la situación: «Salvo una carrera de karts en Japón, será la primera vez que hago una carrera de coches fuera de Europa, y además será en un circuito urbano. Me hace mucha ilusión correr en China tanto deportiva como culturalmente.»

Esta carrera resulta también un importante desafío logístico, ya que el inicio de las operaciones de embarque del material necesario tuvo lugar en Octubre cuando se despacharon por mar los primeros contenedores de piezas y repuestos. El 10 de noviembre fueron enviados por avión los coches, no sólo los de competición sino también los Race-Taxis, Safety Cars y coches de exhibición. Más de 40 toneladas de material que tienen que estar en su destino el día 22 de noviembre.

Nada más terminar la carrera se procederá a la operación inversa, con la particularidad de que los coches estarán en sus bases el 6 de diciembre, mientras el último contenedor no llegará a Europa hasta el 11 de enero de 2011, en el que sin duda será «el más largo fin de semana de carreras de la temporada».

Miguel Molina: «Esta será una nueva y seguro que buena experiencia para mi. No sabemos lo que nos vamos a encontrar allí, pero seguiré intentando conseguir el mejor resultado posible. Y espero que al final me hay ido mejor que en estas últimas carreras.»

Mattias Ekstrom: «El DTM ya corrió en Shanghai en 2004, donde acabé tercero al volante del Audi A4 DTM. Me gustó mucho correr en aquel circuito, así que estoy ilusionado con la idea de volver a correr en China. No sabemos nada del nuevo trazado, será un reto igual para todos.»

23-11-2010//