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Carlsson, uno de los mejores preparadores de Mercedes Benz, ha decidido meterle mano a un auténtica bestia, el Mercedes CLS 63 AMG, renombrándolo como MB CLS 63 AMG Red and White Dream.
En el exterior, parrilla frontal en acero inoxidable de color negro, un spoiler frontal con labio inferior en fibra de carbono, spoiler trasero con difusor integrado. Además presenta un discreto spoiler en la tapa del maletero.
Llantas de aleación ligera de 20″ de cinco radios simples o doble y en tres colores (brillante, grafito y titanio). Pesan un 40% menos que las AMG originales y los escapes trapezoidales originales se han sustituido por unos de forma redondeada.
En el interior el habitáculo nos encontramos con una sobreexposición de color rojo, a nuestro parecer, muy desacertado y ortera, con contrastes en blanco carrocería. Aún montando tan horrendo interior, los materiales utilizados para el habitáculo son de alta calidad, la mayoría está tapizado en cuero nappa de color Santa Red. En el maletero, también tapizado en color rojo, nos encontramos con un tremendo equipo de sonido.
En lo que respecta al motor, monta un 5.5 litros V8 biturbo que gracias al kit Performance Package pasa de los 525 CV de potencia en origen, a los 652 CV de potencia y un par motor de 900 Nm. La aceleración de 0 a 100 km/h se realiza en 4,1 segundos y tiene una velocidad máxima de 250 km/h limitada electrónicamente.
Esta versión puede ir equipada con la suspensión C-Tronic de Carlsson que se adapta en milésimas de segundo a las condiciones de la carrera y permite elevar la carrocería en badenes, rampas o maniobras donde los bordillos pueden dañar el coche
18-01-2012 Agustín Conde
