Lo último de Mazda es el CX5, ahora a prueba
JINBA ITTAI
INTRODUCCION
Con este concepto Japonés, nos metemos en faena a probar el nuevo Mazda CX5. Se trata de un concepto, que hace referencia a la simbiosis entre el caballo y su jinete, el vínculo perfecto entre el caballero y su montura que deben formar un único conjunto en perfecta armonía, teniendo la misma simbiosis de conductor/coche.
Es el modelo de más ventas de Mazda y la marca lo quiere seguir teniendo en esa posición, por ello están pendientes de actualizarlo, teniendo así siempre un vehículo actual y joven.
Nos encontramos ante la segunda generación de este modelo CX5, que mantiene prácticamente las mismas medidas que su antecesor (4,55 metros de longitud), pero con modificaciones exteriores e interiores muy significativas.
Estas modificaciones son muy visibles en la zona delantera, aunque parece un lavado de cara, el coche ha cambiado mucho en su frontal, teniendo ahora una parte delantera mucho más deportiva.
Los precios del nuevo Mazda para los motores gasolina parten de los 27.270€ con el acabado Origin y el motor SKYACTIV-G 2.0 litros de 165 CV 2WD, pasando por los 35.730€ del motor de 160 CV, llegando a los llegando a los 39.595€ del motor 2.5 litros de 194 CV 4WD 6AT Zenith Black.
En motores diésel los precios parten de los 29.520€ para el SKYACTIV-D 2.2 litros de 150 CV 2WD, pudiendo llegar a los 39.780€ del motor diésel de 150 CV 6AT 4WD. Todos estos van sin descuentos, lo que podría bajar los precios una media de unos 3.000 € los precios.
Nosotros tuvimos en nuestras manos el motor de gasolina 2.0 litros de 160 CV con cambio manual y tracción total.
28-08-2017\\ Agustín Conde
DISEÑO
A primera vista vemos que el nuevo Mazda CX5 no hace un cambio total de su diseño con respecto a su predecesor, sino que afila su línea, moderniza el exterior y lo hace mucho más agresivo y atractivo que su antecesor. Ni que decir tiene, que incorpora el concepto de diseño KODO (Alma en Movimiento), como es norma en todos los últimos modelos de la marca.
Las diferencias con su antecesor están en los faros delanteros, ahora son más estilizados y están colocados en una situación más baja. La parrilla delantera ha sido rediseñada dándole un carácter más deportivo, que se acentúa también gracias a la posición y diseño del capó delantero.
El nuevo Mazda CX-5 tiene un centro de gravedad más bajo, los anchos de vía delantero y trasero han crecido en 10 mm, y el pilar A ha retrocedido 3,5 cm lo que redunda en una mejor visibilidad para el conductor. Además se ha ampliado la luneta trasera, mejorando la visión trasera.
En el interior gracias a que se ha aumentado el ángulo de apertura de puertas, el acceso es más cómodo; accedemos y nos encontramos un interior de mucha calidad, materiales con un buen mullido y con la sensación de estar en un gran coche; además la habitabilidad es sorprendente. Nos sentamos en el puesto de conducción, muy cómodo y con una facilidad asombrosa de conseguir el puesto de conducción óptimo. La palanca de cambios, ahora, está situada un poco más alta (6 cm en la caja automática y 4 cm en el cambio manual).
Para que el conductor no tenga que quitar la vista de la carretera se han modificado las posiciones de indicadores y de la consola. La instrumentación central estrena una nueva pantalla de 4,6” (situada entre el velocímetro y el cuentarrevoluciones) y respecto a la pantalla de 7” se ha ubicado en la parte superior del salpicadero.
También es nuevo el sistema Head Up Display que dependiendo del nivel de equipamiento puede ser de dos tipos: con información proyectada en una moldura de plástico o proyectada en el propio parabrisas.
Pasamos a las plazas traseras, y es sorprendente el espacio que queda para rodillas y cabeza, así como que los asientos pueden ser reclinables y equipar calefacción; como siempre la plaza central es algo incómoda, en este caso por tener el respaldo más duro, pero los laterales son muy cómodos. Estos asientos además se pliegan en configuración 40/20/40. Por otro lado, si se abate el asiento central se puede acceder al maletero.
El maletero cuenta con una capacidad que crece hasta los 506 litros, y estrena un portón trasero de accionamiento eléctrico, que se puede abrir desde el interior, desde un botón en el propio portón del maletero o desde el mando de la llave. Además, el ángulo de apertura del portón se puede variar. Si abatimos los asientos la capacidad de carga asciende hasta los 1.620 litros.
Una mejora muy importante y que notamos mientras realizábamos la prueba, es la insonorización del habitáculo. El aislamiento para minimizar el ruido de rodadura, así como la modificación de ciertos elementos (ventanillas acústicas delanteras o limpiaparabrisas colocados un poco más abajo), han reducido notablemente el ruido aerodinámico, consiguiendo un confort en este aspecto extraordinario.
PRESTACIONES
El comportamiento dinámico del nuevo Mazda CX5 corre a cargo de la ultraeficiente tecnología denominada SKYACTIV, que nos ha transmitido un comportamiento refinado, ágil y con respuestas muy precisas en cualquiera de las situaciones a las que nos hemos enfrentado, en los diferentes tipos de vías.
Las mecánicas disponibles para el nuevo Mazda CX5 son dos motores gasolina, un 2.0 litros de 160 CV (con cambio automático) o 165 CV (cambio manual) y un 2.5 litros de 192 CV. Por el lado del diesel esta la opción de un motor de 2.200cm3 con potencias de 150 CV y 175 CV.
El Mazda CX-5 al igual que su antecesor existe la opción de escoger entre tracción al eje delantero (2WD) y tracción a las cuatro ruedas (4WD).
Nuestra unidad de prueba montaba el motor gasolina de 2.000cm3 con 165CV, caja manual de 6 velocidades y tracción a las cuatro ruedas.
Hemos probado principalmente el nuevo Mazda CX5 en carretera y autopista. La verdad es que en ciudad apenas hemos pisado. En líneas generales es un coche muy cómodo de conducir, que no se nota la potencia que lleva en su interior a no ser que nos de por exprimirle por encima de las 2.700 vueltas.
En carreteras reviradas contiene bastante bien los balanceos propios de un coche de sus dimensiones. La dirección es muy precisa, la frenada es enérgica sin movimientos que puedan asustar y la aceleración suficiente para adelantar o incorporarnos con seguridad la conseguimos a partir de los 3.000 rpm.
La conducción por autopista fue de lo más cómoda, el ruido interior es inexistente, la comodidad a bordo es muy buena gracias a unas nuevas suspensiones que amortiguan a la perfección las irregularidades de la carretera (en algunos tramos de la A4, son una pesadilla), y al circular con el nuevo Mazda CX-5 apenas los hemos notado. Es un coche que cuando has terminado de hacer el viaje no ha machacado tu cuerpo, sino todo lo contrario.
El cambio manual de seis velocidades tiene recorridos cortos y es muy rápido en su manejo.
Se nota la puesta a punto que se ha realizado en la dirección. Ahora tiene un tacto mucho más preciso. No es nada pesada en maniobras como la de aparcar y tampoco da la sensación de flotar cunado aumentas la velocidad en autovía.
El nuevo Mazda CX 5 ha incorporado la función “G-Vectoring Control” (GVC, es de serie), cuya finalidad es mejorar la precisión de guiado y suavizar los cambios de aceleración longitudinal y transversal que se originan cuando se aborda una curva. Aumenta la estabilidad y el control del vehículo en cualquier situación, transmitiendo mayor confort a los pasajeros y mayor seguridad al conductor.
En Resumen, un coche cómodo para viajar tanto por la amplitud que muestra en su interior, así como por la insonorización conseguida, y la regulación de los tarados de la suspensión.
SEGURIDAD Y EQUIPAMIENTO
Respecto a los niveles de equipamiento se ha cambiado las denominaciones. Ahora hay principalmente tres: Origin, Evolution y Zenith. Aunque de este último hay dos complementarios que se denominan Zenith White y Zenith Black.
El nivel de acceso es el denominado Origin que de serie incluye seis airbags, ABS, asistente a la frenada en ciudad con detección de peatones, asistente al arranque en pendiente, ESP, control de tracción, control de velocidad, ordenador de a bordo, climatizador, botón de arranque, cuatro elevalunas, start/stop, sensor de lluvia y luces, bluetooth, USB, pantalla táctil de 7” y llantas de aleación de 17”.
El siguiente acabado es el denominado Evolution, que añade a todo lo anterior, sistema trasero de asistencia a la frenada, sistema de aviso de cambio de carril, control de luces de largo alcance, faros full led, iluminación adaptativa, reconocimiento de señales de tráfico, detector de ángulo muerto, alerta de tráfico trasera, head-up display en color, cámara de visión trasera, sensores de parking delantero y trasero y retrovisores con plegado automático.
Y por último, el acabado tope de gama, Zenith añade faros full led adaptativos con 12 leds, sistema de sonido bose con 10 altavoces, navegador, acceso de arranque sin llave, portón trasero eléctrico, llantas de aleación de 19”.
Decir también que Mazda añade una serie de Packs, para completar el acabado Zenith como son:
-Cuero: Tapicería de cuero con los asientos delanteros calefactables, asiento del conductor con ajuste eléctrico y memoria -regulable en altura también- y asiento del pasajero con ajuste eléctrico.
-Cruise: Adicional al Paquete Cuero, incluye Head Up Display proyectado en parabrisas, control de crucero adaptativo con Stop&Go y frenada de emergencia pre-impacto (SBS).
-Roof: Techo solar eléctrico
En el apartado de seguridad, Mazda lo engloba todo dentro del i-ACTIVSENSE, que incorpora los últimos avances tecnológicos, entre los que se incluyen Sistema de Asistencia a la frenada en ciudad avanzado, el Sistema de Frenada de emergencia, el Control de ángulo muerto, el Control de crucero adaptativo o el Detector de fatiga.
Una de las novedades más significativas que incorpora el nuevo Mazda CX5 es el G-Vectoring Control (GVC), que ajusta la entrega del par motor para mejorar la estabilidad del vehículo, especialmente en curva y aumentar el confort de marcha en general.
Además incorpora el control de crucero adaptativo con función Stop&Go, el sistema de reconocimiento de señales o faros LED con función adaptativa, que permite utilizar las largas aunque haya y tiene dos interesantes modos: uno para vías rápidas (más de 95 km/h e ilumina más a lo lejos) y otro para circular a menor velocidad (hasta 40 km/h), que alumbra más los laterales de la carretera.
Gracias a estos sistemas hemos podido disfrutar al máximo de la conducción, sintiéndonos a la vez muy seguros en cualquiera de las situaciones.
En materia de conectividad Mazda incorpora el MZD CONNECT, un sofisticado sistema de conectividad propio de Mazda y que hace más fácil la conexión conductor-vehículo.
A FAVOR
– Diseño espectacular.
– Nivel de acabado y materiales empleados.
– Motorización
EN CONTRA
– Pocas opciones en motores.
– Plaza central trasera