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Mansory ha decidido meterle mano al Maserati GranTurismo, y creo que el resultado es un rato hortera; teniendo en cuenta la belleza que desprende este vehículo, visto por las carreteras, sin ninguna excentricidad.
En esta ocasión Mansory ha apostado por una tonalidad bicolor rojo para la carrocería, y negro para las partes en fibra de carbono, como el spoiler trasero, parrilla frontal, retrovisores exteriores….
Exteriormente, presenta una enorme parrilla frontal de la de sale hacia el capó una franja en negro de fibra de carbono
donde se ubica una toma de aire. Se han añadido una luces tipo LED bajo los faros que guardan algo de similitud con las que monta el nuevo Citroen DS3, y se ha incorporado un spoiler delantero también en fibra de carbono.
En el lateral, mientras tanto, la firma de Pininfarina, como creador de esta belleza, sin tunear claro, y unas estelares llantas de 20″ en el eje delantero, y de 21″ para el trasero, en rojo a juego con la carrocería, montadas sobre unos neumáticos de alto rendimiento de medidas 255/30 R20 delante y 305/30 R21 detrás.
En la zaga, un nuevo spoiler trasero también en fibra de carbono, y nuevas salidas de escape, integrados en el parachoques trasero.
En el interior prosigue la bitonalidad color rojo o negro, tapizado en cuero, los asientos van tapizados en rombos. La iluminación es verde fosforito que destaca especialmente en el velocímetro y el tacómetro; el volante es multifunción y se mezcla fibra de carbono y cuero, y la iluminación es en tonos azules y verdes.
El motor es un V8 de 4.2 litros aumentado hasta los 440 CV de potencia y un par máximo de 490 Nm, gracias a una reconfiguración y optimización de la ECU, y al filtro del aire que deja un mayor flujo. Se han revisado las suspensiones, y se ha modificado la altura del vehículo, rebajándola en 30 mm.
11-09-2010 Luis de Liñán
