LA GAMA MECANICA DE RENAULT, IMPORTANTE GIRO EN MATERIA DE CO2

En la actualidad, Renault considera imperativo reducir drásticamente el consumo de carburante y las emisiones de CO₂. Aunque ya pertenece al top 3 en cuanto a promedio de emisiones de CO₂, Renault aspira al liderazgo en Europa. Para llegar a este objetivo, Renault trabaja para lograr vehículos con un promedio bajo de emisiones contaminantes y con cero emisiones de CO₂, y desea ofrecer a todos las mejores tecnologías a un precio asequible. El desarrollo de los proyectos mecánicos apunta en dos direcciones:

· Se adquiere un compromiso sin precedentes en materia de motores eléctricos con el vehículo 100% eléctrico cuyo uso no genera ninguna emisión de CO₂. Renault ambiciona imponerse como líder en la difusión masiva de vehículos eléctricos. Así, la Alianza Renault-Nissan está desarrollando una gama completa de grupos motopropulsores 100% eléctricos, con una potencia entre 50 kW y 100 kW (70 CV y 140 CV).

· Nuevas tecnologías en los motores y transmisiones convencionales. Renault desarrolla una nueva generación de motores térmicos turbocomprimidos así como nuevas transmisiones automáticas.

Los motores TCe «modulares» de 90 CV a 115 CV

Con el paso a las normas Euro 5 y Euro 6, las motorizaciones de gasolina serán más atractivas. La nueva familia TCe de Renault, lanzada en 2012, se anticipa a esta evolución y debería representar el 85% de las unidades de gasolina de Renault en 2015. Estos motores «modulares» de 0,9 l a 1,2 l de cilindrada estarán disponibles en versión 3 y 4 cilindros en un intervalo de potencia entre 65 kW y 85 kW (de 90 CV a 115 CV). Varios vehículos dotados con estos motores emitirán menos de 100 gramos de CO2 por kilómetro recorrido.

§ El futuro motor 1.6 dCi 130

Este motor de 1,6 l de cilindrada desarrollará una potencia de 96 kW (130 CV) en su lanzamiento. Se está desarrollando en el marco de la Alianza Renault-Nissan y se lanzará en 2011. Emitirá 25 g menos de CO2 que un motor diésel actual de 1.9 l.

§ La transmisión de doble embrague

Esta transmisión se comercializará el próximo año. Combinará una calidad ejemplar en el cambio de marchas con la reducción de las emisiones de CO2. El consumo será idéntico al de una caja de velocidades manual.

LA ESTRATEGIA MECÁNICA DE RENAULT

Emisiones de CO2: convertirse en líder europeo

Para Renault, el mayor desafío al que la industria del automóvil se enfrenta es el reto medioambiental y es necesario que lo asuma si quiere perdurar. Es imprescindible reducir de manera drástica el consumo de los vehículos y garantizar, lo más pronto posible, la transición hacia unos vehículos con cero emisiones de CO2. Renault considera que es esencial ofrecer a todos las mejores tecnologías por un precio asequible.

En 2008, Renault ha conseguido clasificarse entre los tres mejores constructores europeos en materia de emisiones de CO2. Si se compara con el año 1995, el promedio de emisiones de CO2 de Renault ha disminuido un 25% y ha comercializado, a lo largo de estos 14 años, unos vehículos cada vez más silenciosos y seguros. Renault desea ocupar el liderazgo entre los constructores europeos de automóviles en materia de emisiones de CO2 y el Grupo trabaja para ello en dos direcciones:

§ Adquiere un compromiso sin precedentes en materia de motores 100% eléctricos y desarrolla tecnologías absolutamente novedosas. El uso del vehículo 100% eléctrico genera cero emisiones de CO2,

§ Se introducen nuevas tecnologías en las motorizaciones y transmisiones convencionales para reducir de manera significativa las emisiones de CO2.

UN COMPROMISO SIN PRECEDENTES EN MOTORES ELECTRICOS

Una verdadera ruptura tecnológica

Frente a unas soluciones técnicas que proponen reducciones de CO2 del orden de 10, 20 ó 30 g/km, Renault ha optado por una solución de movilidad con unos niveles de emisión de CO2 que rompen con todo lo anterior. Este gran proyecto es el coche 100% eléctrico, cuyo uso no genera ni CO2, ni tampoco contaminantes o contaminación acústica. El objetivo de Renault es convertirse en líder en la difusión masiva de vehículos eléctricos.

El vehículo 100% eléctrico: una solución imprescindible

Son varios los factores que explican el compromiso de Renault con el vehículo eléctrico:

– toma de conciencia del calentamiento global relacionado con las emisiones de CO2;

– endurecimiento de la legislación respecto a las emisiones de CO2;

– aumento estructural de los precios del petróleo;

– crecimiento de las necesidades de movilidad en medio urbano e identificación de un importante mercado potencial en Europa, formado sobre todo por clientes que recorren a diario un trayecto casa-trabajo, los llamados «conmutadores» urbanos, para quienes el vehículo eléctrico representa una solución eficaz;

– dominio de la tecnología de las baterías de Ion-litio, desarrolladas en el marco de la Alianza Renault-Nissan por Automotive Electric Supply Corp (AESC), una asociación entre Nissan y la empresa NEC. Estas baterías se han beneficiado de importantes avances en materia de densidad energética, de seguridad, de durabilidad y de reducción de coste. Todo ello permite ofrecer al cliente un vehículo eléctrico atractivo, agradable de conducir y con una autonomía suficiente;

– desarrollo de nuevos modos de consumo (forfait mensual, pago de servicio según se demande, etc.) que se aplican en múltiples sectores de actividad y que son aplicables al automóvil.

El desarrollo de una gama completa de grupos motopropulsores 100% eléctricos

La Alianza Renault-Nissan desarrolla una gama completa de grupos motopropulsores 100% eléctricos que cubrirá el intervalo de potencia de 50 kW a 100 kW (70 CV a 140 CV). Esta gama está destinada a todas las categorías de vehículos, desde los vehículos urbanos a las berlinas familiares pasando por las furgonetas y los furgones. Los primeros grupos motopropulsores 100% eléctricos se montarán en una berlina tricuerpo y en un vehículo comercial de tipo Kangoo a partir de 2011.

Sin embargo, con el desarrollo de vehículos eléctricos no se pretende reemplazar todo el parque automovilístico. Los motores térmicos, por su versatilidad y los avances de los que beneficien en los próximos años, seguirán siendo una solución apropiada para muchos clientes.

Con el fin de reducir de forma significativa las emisiones de CO2, Renault trabaja en paralelo sobre:

– los pilares fundamentales del vehículo: masa, aerodinámica (SCx), fricciones por rodadura;

– la gestión de la energía eléctrica (recarga de la batería al frenar y desaceleraciones) y térmica (la termogestión, que acelera la subida de temperatura del motor);

– las tecnologías transversales como el stop & start, que corta automáticamente el motor cuando el vehículo está parado;

– la generalización del downsizing de los motores térmicos (un motor más pequeño, sobrealimentado por un turbocompresor que trabaja con un mayor rendimiento), tanto en los de gasolina como en los diésel. Cabe indicar que el potencial de reducción de CO2 actual es mucho mayor en gasolina que en diésel.

– cajas de velocidades con un rendimiento mejorado, manuales o automáticas.

A continuación desarrollaremos estos dos aspectos:

La futura gama de motores TCe «modulares»

Renault acelera el downsizing de gasolina

Los motores de gasolina deben asumir el reto siguiente: mejorar de forma significativa el rendimiento energético, en particular en circulación urbana. El downsizing y la sobrealimentación por turbocompresor aportan soluciones concretas. Lanzado hace dos años y pionero en su categoría (cilindrada de 1.2 l), el TCe 100 ilustra perfectamente esta actuación. El Renault Clio equipado con este motor presenta las emisiones de CO2 más bajas en la categoría de los motores de gasolina de 100 CV: 137 gramos (es decir, un consumo en ciclo mixto de 5,8 l/100 km).

Para mantener la competitividad de la gama gasolina de Renault y asegurar una reducción significativa de la emisión de CO2, Renault desarrolla una familia de motores TCe modulares.

La familia «modular»: los TCe 90 de 115 CV

Con el paso a las normas Euro 5 y Euro 6, las motorizaciones de gasolina deberían ser aún más atractivas. La nueva familia TCe 3 y 4 cilindros es un anticipo de esta evolución. Cubrirá el intervalo de cilindrada de 0,9 l a 1,2 l y sustituirá a motores atmosféricos de 1.2 l a 1.6 l de cilindrada. Sobrealimentados por un turbocompresor de baja inercia, estos motores se centrarán en el intervalo de potencia 65 kW a 85 kW (90 CV a 115 CV). Más adelante Renault desarrollará unas versiones más potentes. La concepción de la base del motor permitirá disponer de la inyección directa y de unas potencias por litro todavía mayores. Las emisiones de CO2 disminuirán entre 30 g y 40 g en comparación con los motores sustituidos, con unas emisiones de CO2 inferiores a 100 gramos por kilómetro recorrido en algunas aplicaciones para vehículos.

Las primeras versiones de estos motores se lanzarán en dos años y medio. Renault calcula que, en el horizonte del 2015, el 85% aproximadamente de sus volúmenes de motorizaciones de gasolina en Europa estarán cubiertos por estos motores.

Esta futura familia de motorizaciones modulares se está originando en el marco de la Alianza Renault-Nissan. Esta práctica permite compartir el coste inicial, realizar economías de escala y adaptar el desarrollo de los órganos mecánicos a las especificidades de una región. Estos futuros motores TCe serán derivados de los motores atmosféricos de 1.5 l y 1.6 l, ya disponibles en la gama Nissan. Renault aprovecha su conocimiento del mercado europeo y su experiencia en materia de sobrealimentación para desarrollarlos en el marco de la Alianza.

La futura gama dCi: un motor totalmente nuevo

Las ventajas de las motorizaciones dCi

El motor diésel 4 tiempos de inyección directa por rampa común (common rail) y sobrealimentado por turbocompresor es en la actualidad la solución de motorización de los vehículos particulares que presenta el mejor rendimiento energético. Un vehículo diésel consume de media entre un 20% y un 30% menos de carburante que un vehículo de gasolina para unos niveles de prestación equivalentes.

En la actualidad, los motores dCi están bien posicionados en materia de emisiones de CO2. Por ejemplo:

– el Renault Twingo dCi 85 emite 104 gramos de CO2 por kilómetro recorrido (es decir, un consumo en ciclo mixto de 4,0 l/100 km),

– – el Nuevo Renault Mégane berlina emite 118 gramos de CO2 por kilómetro recorrido (consumo en ciclo mixto de 4,5 l/100 km),

– – y para el Laguna dCi 110 son 130 gramos de CO2 emitidos por kilómetro recorrido (consumo en ciclo mixto de 4,9 l/100 km).

Los ingenieros de Renault explotarán al máximo la tecnología dCi mejorándola de forma significativa para que estos motores superen las futuras normas de emisiones y consuman aún menos. Estos motores de nueva generación permitirán que muchas aplicaciones de vehículos se sitúen por debajo de los 100 gramos de CO2 por kilómetro recorrido.

Los motores 1.5 dCi de nueva generación

El motor 1.5 dCi (tipo K9K) ocupa un lugar especial en el seno de la gama diésel. Se trata del motor Renault más vendido, con cerca de 900.000 unidades fabricadas en 2008 en Valladolid (España) y en Bursa (Turquía). Ofrece varios niveles de potencia (actualmente de 65 CV a 110 CV) y está presente en muchos modelos de Renault (desde el Twingo al Laguna) y de Dacia. Su concepción sencilla y su bajo nivel de fricción lo convierten en un motor con una relación prestaciones/coste especialmente atractiva.

Renault hará que este motor 4 cilindros de 1,5 l de cilindrada evolucione de manera significativa. Estos futuros cambios hacia una reducción del orden de 20 gramos de las emisiones de CO2 por kilómetro recorrido serán propuestos a partir de 2012.

El futuro motor 1.6 dCi 130

Este motor, con una cilindrada de 1,6 l y totalmente nuevo, aparecerá con una potencia de 96 kW (130 CV) en su lanzamiento. Esto corresponde a una reducción de cilindrada de 16% comparado con un motor diésel actual de 1.9 l con una potencia equivalente y más tarde, Renault desarrollará versiones más potentes. En comparación con este mismo motor, las emisiones de CO2 serán reducidas 25 gramos. A esta reducción se sumarán otras mejoras en el vehículo como el aerodinamismo, la fricción, la masa, etc.). Este motor estará preparado para la norma de emisiones Euro 6 y contará con más de 15 patentes Renault, con lo que constituirá el centro de gama del segmento C además de una motorización clave del segmento D y de los furgones. Su lanzamiento está previsto en 2011. Este proyecto ha sido bautizado como R9M y está siendo co-desarrollado en el marco de la Alianza Renault-Nissan.

Los motores 2.0 dCi y superiores

El motor 2.0 dCi (tipo M9R) de nueva generación estará disponible en 2012. Entretanto, Renault desplegará su política de downsizing para los vehículos comerciales sustituyendo los motores de 2.5 l actuales por una versión 2.3 dCi, que heredará los mismos genes que el 2.0 dCi.

El motor V6 dCi (tipo V9X) seguirá equipando los modelos de la gama alta del Grupo.

Las transmisiones automáticas tradicionales anteponen la comodidad al cambiar de marcha al consumo. Al desarrollar nuevas transmisión automáticas, Renault persigue un doble objetivo:

– mejorar el rendimiento mecánico con respecto a las cajas automáticas tradicionales (con acoplador hidráulico) explotando unas tecnologías derivadas de las cajas de velocidades mecánicas.

– utilizar el potencial de la automatización de la caja de velocidades para que el motor funcione en tramos de mayor rendimiento energético y conseguir así un consumo idéntico al de las cajas de velocidades manuales.

Dentro de un año, Renault propondrá una transmisión de doble embrague. El doble embrague permite cambiar las marchas sin dejar de transmitir el par motor. Esta caja de velocidades asocia un gran confort de utilización (cambio de marcha sin tirones y sin ruptura de tracción) con unas emisiones de CO2 idénticas a las de una caja de velocidades manual, es decir, un 15% menos con respecto a una caja automática tradicional.

18-02-09