INTERNET LLEGA AL AUTOMÓVIL. BOSCH ESTÁ CONECTANDO EN RED LOS VEHÍCULOS Y REVOLUCIONANDO LA MOVILIDAD
Hace 20 años, Internet revolucionó la informática. En los próximos años va a revolucionar también el mundo del automóvil. Bosch está convirtiendo el coche en un agente activo de Internet. Para los conductores, esto tiene muchas ventajas. «Un coche conectado es siempre un coche mejor», asegura Wolf-Henning Scheider, miembro de la Alta Gerencia de Robert Bosch GmbH y responsable del área empresarial Tecnología para la Automoción. Con la conexión en red de los vehículos, Bosch mejora la comodidad, la seguridad y la eficiencia de la movilidad del futuro. Al mismo tiempo, la empresa lleva la fascinación del mundo digital a la carretera. El Grupo persigue con ello un triple objetivo estratégico: Bosch lleva internet al vehículo para que se viva de forma intuitiva; proporciona funciones de asistencia con valor añadido, y, además, conecta el coche con la infraestructura de tráfico. «La conexión en red es mucho más que navegar por Internet durante el viaje», asegura Scheider. En la actualidad, Bosch está participando activamente en todos los campos necesarios de la tecnología y fabrica ya las primeras soluciones enserie. En el futuro, surgirán nuevas funciones. Por ejemplo, la llamada Realidad Aumentada conectará el mundo virtual con el mundo real. El parabrisas se convertirá en la pantalla central y pondrá toda la información del vehículo y de su entorno en el campo visual del conductor.
Objetivo 1: Hacer que internet forme parte del coche
La conectividad es ya, hoy en día, una mega-tendencia en la industria del automóvil, debido a que ladigitalización seduce cada vez a un mayor número de personas. También el coche va a ser parte de esta digitalización. Es por eso que los ingenieros de desarrollo de Bosch trabajan en soluciones intuitivas y sofisticadas. Una de ellas es el sistema MySpin, con el que se pueden integrar perfectamente los smartphones iPhone y Android en los vehículos, de forma que la pantalla del dispositivo móvil será visible en el monitor central del vehículo. Las Apps se pueden utilizar así en el vehículo de forma mucho más sencilla, segura y confortable.
Incluso sin un teléfono móvil, Bosch lleva internet a los vehículos. Los actuales sistemas de navegación encuentran, por ejemplo, diferentes tipos de restaurantes. Con las ofertas de servicio de Bosch, en el futuro el conductor podrá dejarse guiar directamente, sin una larga búsqueda, a la estación de recarga libre, o reservar el estacionamiento más cercano y dirigirse hacia él.
Pero Bosch está, incluso, conectando el sistema propulsor a internet. El caminohacia ello se prepara mediante el sistema denominado eHorizon(Horizonte electrónico) de Bosch, en el que confluyen décadas de experiencia en sistemas de propulsión y la programación de software innovador. «Combinamos el mundo de la mecatrónica con el mundo digital», afirma Scheider. Para los vehículos comerciales, Bosch ofrece el horizonte electrónico desde 2012, con el fin de hacer que los viajes sean homogéneos y reducir las aceleraciones y desaceleraciones innecesarias. El software de navegación detecta, por ejemplo, que después de dos kilómetros cuesta abajo hay una señal de entrada a una población y realiza ese trayecto en el modo más económico o recarga la batería. De esa manera, los conductores pueden ahorrar hasta un 15 por ciento de combustible. En el futuro, los datos de navegación se complementarán con datos actuales recogidos a través de internet sobre la situación en la carretera, por lo que los vehículos pueden, por ejemplo, rodar por inercia hasta llegar a un atasco de tráfico próximo. Esta navegación en red, en la que el vehículo tenga en cuenta los datos de internet, no sólo se encontrará en los camiones del futuro, sino también en los turismos.
Objetivo 2: Hacer que el coche forme parte de internet
Sin embargo, la autopista de la información en el automóvil no es una calle de sentido único. Los vehículos no sólo utilizarán la información de internet, sino que también transmitirán informaciones a su entorno. Para ello, Bosch hace que los vehículos formen parte de internet. «Para la conexión del vehículo a la nube creemos que la protección de datos es un requisito previo imprescindible. Las ventajas deben superar de lejos los riesgos potenciales», dice Scheider. Para lograr este objetivo, la filial de Bosch escrypt ha desarrollado unas soluciones de seguridad especialmente adaptadas al automóvil, tales como un cifrado específico.
Los vehículos se convertirán en el futuro en sensores que recogerán informaciones de su entorno y las intercambiarán entre sí o con un servidor. Conocida como “Floating Car Data”, esta información es necesaria tanto para obtener mapas altamente dinámicos, como para mejorar la seguridad del vehículo. Mientras que el conductor sólo ve una curva, la navegación ya sabe que detrás de ella hay hielo en la calzada o un atasco de tráfico. De esa manera, se puede evitar que un coche o un camión circulen deprisa ante un accidente o una caravana de coches. El sistema puede avisar al conductor o iniciar automáticamente una operación de frenado. «La conexión en red es un componente básico de la automatización, y viceversa», dice Wolf-Henning Scheider.
Ya existen las primeras aplicaciones con las que los vehículos se comunican con el mundo exterior. Un ejemplo de ello es el sistema eCall, que será obligatorio en la Unión Europea en 2015. Este sistema establece automáticamente una llamada de emergencia cuando un vehículo está implicado en un accidente. Este se activa, por ejemplo, a través de los mismos sensores que activan el despliegue de los airbag. Esto reduce el tiempo de respuesta de los servicios de emergencia en las zonas rurales en un 50 por ciento y en las zonas urbanas en un 40 por ciento. El papel de Bosch va aquí mucho más allá de la tecnología. La compañía proporciona la interfaz entre el accidente y el rescate. En un centro de control de seguridad los empleados de Bosch tramitan las llamadas de emergencia y proporcionan la información oportuna y precisa para el personal de emergencia.
Además de mejorar la seguridad, la combinación de datos del vehículo también ahorrará dinero, especialmente para las empresas y flotas. Con LeasePlan, Bosch conecta en red los vehículos, lo que permite una nueva forma de análisis de las flotas. Además, Bosch está impulsando soluciones para el mantenimiento preventivo. Por ejemplo, los datos del motor de una excavadora o de una pala cargadora se transmiten a las bases de datos, donde se analizan y comparan con un grupo de datos cada vez mayor sobre vehículos y usos similares. Así, Bosch puede predecir cuándo un componente importante alcanza el límite de desgaste para que la pieza pueda ser reemplazada a tiempo. Usando el ejemplo de la excavadora, se evita tiempo de inactividad y se ahorra dinero, ya que cada hora que no trabaja una máquina de este tipo, le puede llegar a costar al operador hasta 2.000euros. En el futuro, estas funciones también serán concebibles para turismos. Un ejemplo de aplicación sería un indicador de desgaste de las piezas delmotor. De esa manera, los conductores no se quedarían repentinamente parados con su vehículo en la carretera, ya que podrían cambiar a tiempo un componente dañado.
Objetivo 3: El coche forma parte del Internet de las Cosas y de los Servicios
Pero la interconexión de los coches con internet va aún mucho más allá de estas aplicaciones. «La conexión en red del automóvil es una gran tarea. Hasta ahora, los coches estaban aislados de su entorno, en el futuro van a interactuar con él», dice Scheider. Incluso se podría conectar en red unaciudad grande, incluida su infraestructura, de modo que se garantizaría una movilidad óptima. Si alguien quiere ir, por ejemplo, desde el centro a la periferia, puede utilizar para el centro de la ciudad el metro y luego cambiar a un vehículo de car-sharing. A través de las plataformas de Bosch con Service Brokering, el transporte público, empresas de alquiler de coches eléctricos y de bicicletas eléctricas, podrán ofrecer conjuntamente una oferta de movilidad integral.
En la actualidad ya se controla incluso la infraestructura de grandes proyectos piloto de conducción eléctrica por las plataformas de software de Bosch. Un ejemplo es Hubject, el sistema roaming para las estaciones de recarga. De esa forma, los clientes podrán cargar sus vehículo eléctricos en estaciones de recarga de distintas empresas y pagar las recargas cómodamente a través de la factura de la luz. Pero, también fuera de la movilidad eléctrica, Bosch tiene muchos otros proyectos. Con el Truck Secure Parking se podrán reservar online estacionamientos de camiones con videovigilancia a lo largo de la carretera, los cuales estarán conectados a un Call Center de Bosch. De esa manera, tanto la carga como el conductor podrán permanecer en un entorno seguro.
Boschya está trabajando, incluso, en trasladar una ciudad entera al Internet de las Cosas y de los Servicios. Desde mediados de noviembre de 2013, se utilizan tecnologías de Bosch para la conexión digital en red en el Principado de Mónaco. De esa manera, se ha dado el primer paso en la aplicación del acuerdo de cooperación que se firmó en julio de 2012 entre el Principado y Bosch. El proyecto ofrece una mirada hacia el futuro. En un principio se centrará elenfoque de la ciudad en red en el ámbito de la movilidad. Aplicaciones para ello hay suficientes: guiar al conductor hacia la estación de recarga libre más cercana; la reserva y la facturación de un aparcamiento; en función de las condiciones del tráfico cambiar a una bicicleta eléctrica – este desarrollo se vislumbra ya para las mega-ciudades de todo el mundo.
Por eso, Bosch ve en la conexión en red de los vehículos la posibilidad de unmercado global. La mayoría de los consumidores y las empresas de automoción trabajan en la interconectividad del automóvil. Vehículos automatizados yconectados, por ejemplo, pueden mejorar el flujo del tráfico rodado en un 80 por ciento o facilitar que las personas mayores tengan una movilidad cómoda y segura. Los estudios parten de que si los vehículos están cada vez más automatizados, el número de víctimas mortales podría reducirse hasta en un 90 por ciento. Para conectar los vehículos a Internet, Bosch ha establecido un estrecho diálogo con los fabricantes mundiales de automóviles y con empresas innovadoras en otros sectores, tanto en Europa, como en Norteamérica y Asia.