HYUNDAI IONIQ: ASÍ SE CREÓ UN HÍBRIDO QUE EMOCIONA AL CONDUCIRLO
Hyundai Motor ha creado un automóvil híbrido que rompe el estereotipo de los híbridos. Y es que desde el inicio de su desarrollo se primó la idea de que la ecología no tiene por qué estar reñida con el disfrute al conducir. Queríamos que el IONIQ fuera emocionante al conducirlo, además de tener el mejor rendimiento de combustible.
Moon-Sik Kwon, vice presidente del Centro de I+D de Hyundai Motor, asegura que «el IONIQ se ha desarrollado gracias a la incorporación de todas nuestras habilidades tecnológicas. El híbrido tiene el objetivo de ser el más eficiente de su clase, pero es fiel a los principios de cualquier vehículo: proporcionar una conducción amena gracias a una moderna ingeniería y a una conducción dinámica».
Guerra al peso
Un vehículo híbrido presenta un hándicap desde el punto de vista del desarrollo de su chasis: el peso de las baterías y el espacio que necesitan. El equipo de desarrollo del IONIQ decidió convertirlo en una virtud, aprovechando el hecho de que Corea del Sur es el líder mundial de desarrollo tecnológico y fabricación de baterías.
El IONIQ disfruta de un paquete de baterías de iones de litio polímero, en lugar de las baterías convencionales de hidruro de níquel metal que emplean la mayoría de sus competidores. Además de un superior rendimiento máximo y una menor sensibilidad de efecto memoria, estas baterías son más compactas y ligeras. El equipo de ingenieros de Hyundai Motor las ubicó debajo de los asientos traseros, un lugar ideal para bajar el centro de gravedad del vehículo y equilibrar su reparto de pesos entre ejes.
El uso de baterías de litio no ha sido el único esfuerzo del equipo de desarrollo para reducir el peso del IONIQ híbrido. El capó y el portón del maletero están hechos de aluminio, lo que permite reducir en 12,4 kg el peso de la estructura con respecto a una plataforma tradicional de Hyundai, sin causar desventajas en el ruido o la vibración. La estrategia de disminución de peso se ha llevado hasta el último detalle: por ejemplo, la bandeja cubre maletero es un 25% más ligera que la versión utilizada en otros modelos de Hyundai gracias a un mayor uso de componentes ligeros.
Hyundai ha empleado un 53% de acero avanzado de alta resistencia en la carrocería del IONIQ, lo que aporta seguridad y rigidez para un manejo más preciso del vehículo. No hay que olvidar que Hyundai cuenta con un centro propio de i+D y es un especialista en la fabricación de acero.
Las mejores suspensiones
En las suspensiones se ahorran alrededor de 10 kg de peso gracias al uso del aluminio. Una reducción de 2,3 kg en los brazos de suspensión delanteros supone una disminución de 4,6 kg en el frontal del vehículo, mientras que en la parte trasera se reducen 7,14 kg. Además de reducir la masa del vehículo en zonas sensibles, la reducción de peso de los elementos de la suspensión hace que generen menos inercias y ofrezcan un funcionamiento más preciso.
Los ingenieros se propusieron dotar al IONIQ de la mejor arquitectura de suspensiones posible. En el eje trasero se diseñó un sofisticado eje multibrazo, algo muy raro en un híbrido, pues las baterías suelen ocupar demasiado espacio para un eje de ese tipo.
La puesta a punto de chasis y suspensiones se llevó a cabo en Europa y se contó con el asesoramiento de Hyundai Motorsport en Alemania. Varias unidades del IONIQ camufladas recorrieron más de 100.000 kilómetros de pruebas en todo tipo de carreteras. Y se realizaron jornadas de test en circuitos como Nürburgring. Pilotos, conductores e ingenieros trabajaron codo con codo para conseguir que el IONIQ fuera un coche seguro y transmitiera las mejores sensaciones de conducción.
Tanto el tacto de conducción del vehículo, así como el ruido, vibración y sus niveles de dureza se han afinado especialmente para contribuir a una calidad de conducción y a la comodidad en los viajes largos. Se trabajó en ese sentido hasta el punto de que el sistema de suspensión multibrazo fue adaptado con el fin de que funcionara a la perfección con neumáticos Michelin de baja resistencia a la rodadura.
La dirección fue otro de los puntos en el que se concentraron esfuerzos y el resultado se nota, desde el tacto del volante, a la posición de conducción, pasando por las sensaciones que transmite al conductor, y la precisión y fidelidad con la que responde a sus órdenes.
Otro de los requerimientos del equipo de desarrollo era conseguir una calidad de rodadura líder en su segmento. Para conseguirlo se trabajó en el aislamiento del salpicadero, que minimiza el ruido del motor, además de en la amortiguación de los paneles de los bajos, así como en los ejes delanteros y traseros, una luneta trasera más gruesa y una película de reducción de ruido en el parabrisas.
Un cambio DCT hecho a la medida de la conducción
La respuesta al acelerador y el tacto del motor es otro de los elementos que influyen decisivamente en el placer de conducción. A diferencia de otros vehículos híbridos, que suelen ser criticados por su falta de aceleración instantánea, el IONIQ hace uso de su transmisión de doble embrague de seis velocidades DCT para seducir al conductor y sacar el mejor partido de las tecnologías eléctricas y de combustión. La conexión entre el acelerador y el motor es muy directa en el IONIQ.
“Este cambio de doble es el compañero ideal de un grupo propulsor híbrido”, asegura uno de los responsables de desarrollo. Y es que la sensación de empuje es muy superior a la que podría deducirse de sus cifras de potencia. El híbrido IONIQ está equipado con un motor nuevo tipo Kappa GDI de 1,6 litros de cilindrada. Se trata de un grupo motopropulsor GDI 1,6 de 105 CV a 5700 rpm con un par máximo de 147 Nm a 3.700 rpm. Esta mecánica está asociada a un motor eléctrico de 44 CV de potencia, ofreciendo un rendimiento combinado híbrido de 141 CV a 5700 rpm y 270 Nm de par motor.
El conductor del IONIQ percibe una aceleración emocionante y una rápida respuesta al acelerador, y puede accionar secuencialmente las marchas desde la palanca de cambios. Si desea una conducción más deportiva, puede activar la función SPORT, que mantiene las marchas cortas más tiempo, aumenta el régimen del motor en cada cambio y combina potencia del motor de gasolina y eléctrico para conseguir las mejores prestaciones posibles. Para completar la experiencia de conducción, el habitáculo cambia de ambiente en función del modo de conducción que se elija. Los dispositivos y colores de fondo se adaptan para ofrecer en todo momento la información más útil e importante, así como proporcionar una atmósfera relajante o deportiva mediante los colores utilizados.
Además, la caja de cambios DCT presume de ofrecer la mejor eficiencia de transmisión de su clase mediante el uso de rodamientos de baja fricción y aceite de transmisión de baja viscosidad.