Ford Focus ST Line Red&Black Edition
IMAGEN DEPORTIVA, CORAZON ENERGICO
INTRODUCCIÓN
Esta semana nos hemos puesto al volante de una de las versiones de imagen deportiva más atractivas del Ford Focus, la denominada ST-Line (la otra es, por supuesto, la RS), un coche con una estética rompedora, unas prestaciones de infarto y una diversión totalmente asegurada al volante.
El motor sobre el que girará la prueba será el bloque 2.0 litros TDCi de 150 CV asociado a un cambio manual de 6 velocidades y que trae muuuchas sorpresas…
Los precios del Ford Focus van desde los 19.400€ del acabado Trend y el motor 1.0 litros Ecoboost, pasando por los 20.875€ del acabado Trend+ del mismo motor de 125 CV de potencia, llegando a los 22.025€ para el acabado ST-Line.
Por encima se sitúan el acabado Titanium que parte de los 22.525€, el modelo ST-Line Red&Black Edition, que hemos probado, parte de los 23.925€, mismo precio de salida que el ST-Line Black&Red.
Como modelos tope de gama tenemos el Focus ST, que parte de los 31.150€ con el motor 2.0 CDTi de 185 CV, el Focus RS con un motor 2.3 Ecoboost de 250 CV parte de los 41.910€, y el RS Performance se sitúa en los 46.010€ con el mismo motor, pero aumentando su potencia hasta los 300CV.
A continuación, os dejamos nuestras impresiones.
11-05-2018\\ Agustín Conde
DISEÑO EXTERIOR
Dentro de las diferentes gamas de Ford, hay unos acabados con eminente carácter deportivo tanto estético como en rendimiento. Una de estas terminaciones es la ST-Line, que con algunos retoques cambia radicalmente su aspecto.
El frontal tiene una nueva parrilla en forma de panal de abeja pintada en negro mate, en vez de la parrilla más clásica de lamas horizontales cromadas. Cambia también el paragolpes, para darle un toque más deportivo.
En el lateral, llantas multiradio, en tono negro con radio de 17”, alojan neumáticos con medida 215/50 de perfil bajo. Destacan las nuevas taloneras y un gran alerón trasero que prolonga la línea del techo.
En la trasera también es nuevo el paragolpes, así como el faldón inferior.
La versión ST-Line, cuenta con unas suspensiones específicas, que hacen que el vehículo esté más pegado al suelo y monta un tarado más duro y deportivo que en un Focus convencional.
Y como su nombre indica (Red&Black Edition) va en pintura RED (Rojo eléctrico), con el techo en Negro, resaltando aún más el vehículo.
DISEÑO INTERIOR
Pasamos al interior, aquí los cambios respecto aun Focus convencional son menores, la moldura cromada en el umbral de las puertas delanteras con el logo ST-Line, pedales de aluminio y asientos más deportivos y personalizados con pespuntes en rojo, son las diferencias más notables respecto a cualquier otro nivel de acabado del Ford Focus.
Las plazas delanteras son bastante cómodas, y el puesto de conducción óptimo se consigue con relativa facilidad. Todos los mandos y la información del vehículo están dispuesta de una manera muy cómoda para el conductor y facilitan tanto lectura como manejo, olvidándonos de las anteriores configuraciones en donde había mucha botonadura.
El volante multifunción engloba todos los mandos esenciales para no tener que apartar la vista de la carretera. Los relojes son grandes y de fácil legibilidad, y la pantalla central muestra toda la información necesaria que el conductor pueda necesitar.
En el centro del salpicadero se encuentra la pantalla táctil de 8”, desde la que se controla prácticamente todo: Navegador, cámara de visión trasera, música, Bluetooth,.. Los materiales son plásticos correctos, de buen aspecto visual y agradables al tacto, además de contar con unos ajustes más que correctos.
La habitabilidad es como en tantos compactos, buena en la parte delantera, y algo más justa en la trasera, si lo que queremos es ir 5 personas en su interior. 4 personas van perfectamente, la quinta, es la que ira más incómoda, dado que la plaza central es más estrecha y pequeña para un adulto.
El maletero tiene 363 litros de capacidad (no cambia respecto a cualquier otro Ford Focus). Es espacioso y muy aprovechable, tanto por sus formas rectangulares como por la altura de carga.
PRESTACIONES Y COMPORTAMIENTO
Ponernos al volante del Ford Focus ST-Line 2.0 CDTi de 150 CV ha sido todo un lujo, si bien se trata de un coche con alma deportiva, es un vehículo muy agradable y cómodo de conducir en cualquier situación, además de mantener un gasto de combustible muy contenido.
Su motor responde desde bajas vueltas entregando potencia en poco tiempo, y sino tenemos algo de tino, el coche se propulsa con energía. Los adelantamientos en carretera, incorporaciones, son minucias para este motor. Estas acciones duran se realizan con total seguridad, dado que el acelerador responde con contundencia a medida que los pisamos.
El Focus ST-Line goza de un buen paso por curva, la suspensión sin llegar a ser muy dura y seca funciona de maravilla evitando balanceos innecesarios en zonas reviradas. Es un vehículo que dada su alta comodidad en marcha nos permite realizar muchos kilómetros con él sin acusar cansancio.
El cambio es manual de 6 velocidades, con unas primeras marchas muy cortas y con una sexta, que está enfocada a paliar el consumo, ideal para autopistas/autovías.
La caja tiene un toque deportivo, en cuanto al movimiento de esta. Son movimientos cortos, directos y con buen tacto.
Nos metemos en faena y lo primero es la gran ciudad, un ambiente hostil, sobre todo para los consumos. Lo bueno que tiene es su tamaño, el ideal para un coche de uso diario, poco más de 4 metros, que le dan una maniobrabilidad muy buena y que hace que se mueva con soltura, además el tema aparcamiento no tiene ningún problema, y por otro lado tenemos un maletero más que suficiente para hacer la compra, recoger un par de paquetes y llevar la bolsa del gimnasio y el portátil para el trabajo, es decir, con más maletero que lo que podría tener un utilitario y con la misma facilidad de maniobra que muestra este tipo de coches más pequeños que el Ford Focus.
Como hemos dicho el consumo, se ha situado durante la prueba con una media de los 5,9 L/100 de media. Esta cifra la consigue en parte a la ayuda del sistema Start & Stop.
De ahí salimos por la Autopista A6 preparados para devorar kilómetros. Podríamos pensar que, al ser una versión deportiva, iba a ser un poco tabla, pero nada de eso, es un coche bastante confortable, con un aislamiento acústico notable, y con una sexta marcha que nos permitió unos consumos por debajo de 5,0 L/100 km, circulando a 100Km/h.
Tras un par de horas y después de un tentempié, decidimos meterlo en su hábitat, carretera, curvas, puertos,.. donde sabíamos que nos íbamos a divertir y que podríamos exprimirlo a gusto.
Aquí sí que se nota que esa suspensión más firme y rebajada del ST-Line, respecto a sus hermanos (obviando el RS, por supuesto), sitúa mejor el coche en los cambios de apoyo, y de dar más seguridad a la hora de enlazar curvas. Además de filtrar perfectamente los baches y diferentes desniveles de la carretera, la sensación de aplomo y seguridad a bordo es sobresaliente.
Con lo que tienes un vehículo deportivo, pero donde el confort interior no se ve penalizado; decir también, que los asientos delanteros también hacen su trabajo, ya que agarran y no permiten que te bandees. La sujeción lateral es estupenda, el cuerpo queda en el asiento sin moverse sin ápice fuera de él.
Pues eso, es ponerte a enlazar curvas rápidas, lentas, subidas, y el coche te va pidiendo algo más. La dirección es muy precisa, y directa, el cambio es rápido y suave, y los frenos clavan literalmente el coche; al acelerar a fondo, o a la salida de las curvas, el coche tiene un ligero baile, apenas perceptible y cuando lo hace, se coloca en su sitio en milésimas.
NIVELES DE ACABADO Y EQUIPAMIENTO DE SEGURIDAD
En cuanto a niveles de acabado el Ford Focus presenta el Trend, Trend+, ST-Line, Titanium y RS. Además, presenta unas Ediciones Especiales que son ST-Line Red&Black, ST-Line Black&Red y RS Performance.
Para la terminación Red&Black Edition, que es la que nos ocupa en esta prueba, el coche viene bastante bien equipado. Entre otros elementos de confort y seguridad, nos encontramos con navegador, sensores de aparcamiento delanteros y traseros, cámara de visión trasera, ordenador de a bordo, asistente de arranque en pendiente.
Además incorpora Start/Stop, arranque y apertura de puertas sin llave, frenada de emergencia autónoma, sensor de presión de neumáticos, llantas de 17”, suspensión deportiva, sistema de control por voz SYNC3 o control de velocidad de crucero con limitador, entre otras cosas.
A FAVOR:
-Consumos ajustados
-Potencia de sobra para salir de cualquier situación con seguridad.
-Acabado ST-Line, deportivo y diferenciador.
EN CONTRA:
-Plaza central trasera
-Maletero de capacidad algo mas justo que sus rivales mas directos.