FERRARI 288 GTO – Eddie Irvine
Nacido en Bangor Erris, Irlanda del Norte, Irvine comenzó su relación con el deporte motor en 1983, debido en gran parte a la influencia de sus padres, quienes también tenían intereses en la actividad.
En 1988, comenzó a participar en la Fórmula 3 Británica, como paso previo a su incursión por la Fórmula 3000 en 1989. Al año siguiente, pilotó uno de los coches de Jordan en la Fórmula 3000 Japonesa. Fue con esta escudería con la cual pasaría en 1993 a la Fórmula 1.
En su debut en Suzuka en 1993, Irvine advirtió en sus espejos retrovisores que Ayrton Senna estaba a punto de sacarle una vuelta de ventaja. Claramente, debía dejarlo pasar, en primer lugar porque el irlandés se encontraba rezagado, y en segundo lugar porque el piloto detrás de él era un ex campeón y uno de los hombres más talentosos de la categoría. No obstante, Eddie no cedió su posición, lo cual le valió un puñetazo por parte del brasileño.
En 1995 fichó por la escudería Ferrari junto al entonces doble campeón de F1 en Bennetton Michael Schumacher, con quien compartió equipo desde 1996 a 1999. Irvine destacó por su labor de equipo y su apoyo al número uno de la escudería, labor que durante mucho tiempo no tuvo el reconocimiento merecido por parte de los propios aficionados italianos.
Sería en 1999, tras el accidente de Michael Schumacher en Silverstone se convirtió en el primer espada de la Scudería y tras ganar su primer Gran Premio en el Albert Park de Melbourne, Irvine tuvo que contentarse con el subcampeonato y el hecho de haber colaborado decisivamente a la obtención del mundial de constructores por parte de Ferrari, el primero desde 1983, además de los cuatro grandes premios que ganó aquella temporada.
En el año 2000 fichó por la escudería Jaguar heredera de la Stewart Ford, con la vitola de subcampeón del mundo y uno de los mayores contratos de los últimos tiempos en la F1, 3 años a razón de 12 millones de euros por temporada.
A la mala planificación del equipo y del monoplaza se unieron los problemas por encontrar un segundo piloto para la escudería puesto que entre 2000 y 2002 Irvine compartió equipo con Johnny Herbert, Luciano Burti y Pedro Martínez de la Rosa, sin que ninguno de ellos diese el resultado esperado. A pesar de ello en contadas ocasiones pudo demostrar su valía y situó su monoplaza en el podio, la última en el año 2002 cuando compartió el cajón con los dos Ferrari en el Gran Premio de Italia para delirio de los tifosi, quienes le premiaron con una sonada ovación reconociendo su paso por la Scuderia.
Por supuesto uno de sus vehiculos favoritos es el que os presenta,mos a continuación, el Ferrari 288 GTO, un superdeportivo de homologación presentado en el Salón del Automóvil de Ginebra de 1984 por el fabricante italiano Ferrari y fabricado entre 1984 y 1986.
Este modelo ha sido el primero de una línea de superdeportivos de Ferrari continuada por los Ferrari F40, F50 y Enzo. El 288 GTO equipaba aire acondicionado y sistema de sonido y fue nombrado el segundo mejor automóvil de la década de 1980 por la revista americana Sports Car International, por detrás de su rival alemán el Porsche 959.
El nombre 288 GTO significa que tiene un motor de 2,8 litros V8 y que es un Gran Turismo Omologato. El diseño es obra de Pininfarina, basado en el diseño del Ferrari 308 GTB, y fue creado para competir en la nueva serie de carreras del Grupo B. Para ello necesitaron crear más de 200 unidades (273 en total del Ferrari 288 GTO) y con motores atmosféricos de hasta 4.0 litros de cilindrada
Tiene un motor central V8 de 2855 cc de cilindrada con dos turbocompresores IHI, intercoolers, e inyección de combustible Weber-Marelli, desarrolla una potencia máxima de 400 CV. El Ferrari 288 GTO puede acelerar de 0 a 100 km/h en menos de 5 segundos y de 0 a 160 km/h en 10,0 segundos. Su velocidad máxima es de 305 km/h.
Ferrari construyó 6 unidades del Ferrari 288 GTO Evoluzione, una versión que veía aumentada su potencia, con una aerodinámica más agresiva y construida con fibra de vidrio y kevlar. La transmisión era manual de 5 velocidades y llevaba un motor V8 de 650 CV de potencia; era capaz de alcanzar los 370 km/h de velocidad máxima.