MIGUEL MOLINA VUELVE A HOCKENHEIM

Por primera vez desde la reinstauración del DTM en el año 2000, la segunda carrera de Hockenheim no pondrá fin al campeonato, aunque si será una cita importante para el mismo y para Miguel Molina, que se reencontrará con el circuito en el que debutó con éxito en el mes de abril.

Desde que se restableció el DTM en 2000, Hockenheim había sido escenario de la primera y la última carrera del certamen. Este año, por primera vez, este formato cambia al incluirse dos carreras posteriores, una en Adria (Italia) y la final en Shangai (China). Hockenheim sigue albergando su segunda prueba, una de las más carismáticas de la temporada, y que acostumbra a batir records de espectadores: el año pasado llegó a 150.000 a lo largo del fin de semana.

Para diferenciar un poco las dos citas, los responsables del circuito han decidido modificarlo acortando la larga recta más o menos por su mitad y suprimiendo el famoso ángulo de su final. Según Armin Plietsch, Project Manager del departamento de tecnología de Audi Sport, esperamos que los tiempos por vuelta se reduzcan unos trece segundos. Y aunque ahora haya dos nuevas curvas, no deberían afectar la puesta a punto de referencia de nuestros Audi A4 DTM en este circuito.

Tras la carrera de Oschersleben, en la que el Audi de Timo Scheider perdió la oportunidad de ganar debido a un pinchazo, el equipo al completo espera rendir a su mejor nivel en esta nueva cita, última de la temporada en tierra alemana. Aunque el campeonato ya está muy difícil, Audi quiere seguir ganando en la pista que ha sido testigo de la adjudicación de los últimos tres campeonatos para sus pilotos Mattias Ekström (2007) y Timo Scheider (2008 y 2009).

Miguel Molina está muy ilusionado con esta nueva cita en Hockenheim, ya que en ella debutó en el pasado mes de abril en la que fue su primera carrera DTM, su primera visita a esta pista, y también su primer punto para el campeonato. Además tiene ganas de volver a ponerse al volante para quitarse el mal sabor de boca de la última carrera de Oschersleben, en la que tuvo que abandonar en la primera vuelta.

Miguel Molina: “Estoy impaciente por volver a Hockenheim y por tener un buen fin de semana de carreras tras lo de Oschersleben. Tengo buenos recuerdos de la pista, no sólo fue mi debut, sino que también conseguí mi primer punto. Comparado con entonces el circuito estará un poco cambiado y las vueltas serán más cortas, pero espero que igualmente estemos al mismo nivel de competitividad que en Zandvoort y Brands Hatch”.

Markus Winkelhock: “Para mi correr en Hockenheim es casi como hacerlo en casa, pues vivo a apenas 120 km. Siempre me he adaptado bien a este trazado, en el que hay dos o tres lugares para adelantar. Además es muy agradecido para el público, que siempre lo abarrota, algo que los pilotos podemos sentir dentro del coche. Cuando mi tío Jockel corría en el DTM, a mi me gustaba ver las carreras desde la curva llamada Sachs”.

15-10-2010