Prueba del Mercedes EQB 300 4Matic, SUV 100% eléctrico y de 7 plazas

Esta semana nos ponemos al volante del Mercedes EQB 300 un SUV de tamaño mediano y con una similitud al Mercedes-Benz GLB, y que no hace mucho recibió una actualización.

Respetando unas medidas muy similares a su hermano de combustión, de 4.684 mm de longitud, por 1.834 mm de ancho y 1.706 mm de alto, y manteniendo un diseño muy acertado, han conseguido hacer un SUV 100% eléctrico y con hasta 7 plazas, algo novedoso y único en el mercado.

Precios

EQB 250+	532 km	58.502 euros
EQB 300 4 MATIC	444 km	61.062 euros
EQB 350 4 MATIC	444 km	63.400 euros

Exterior

Cómo hemos comentado antes, su estética es muy parecida al Mercedes GLB aunque cuando lo vemos en detalle, se aprecian bastantes diferencias. Empezando por el frontal, con una parrilla completamente ciega (renovada en la nueva actualización de agosto) y un tira luminosa LED por encima, que conecta las luces diurnas con tecnología LED High Performance de serie, dándole personalidad propia.

Esta nueva actualización recibida hace un par de meses, trae consigo además nuevos detalles estéticos así como numerosas actualizaciones en cuanto a su eficiencia y a sus nuevas y útiles funciones, que lo equiparan a sus hermanos EQ mayores.

La vista lateral es casi idéntica al GLB con sutiles diferencias como la insignia EQB, la tapa de carga y las llantas de 19 pulgadas con neumáticos en medidas 235/50. Nuestra unidad de pruebas equipa el paquete AMG Line, incorpora llantas de 20 pulgadas, que son las más grandes que puede montar.

En la trasera se han modificado los pilotos, ahora van unidos dejando un portón trasero más moderno. La matrícula se ubica en la zona baja al no haber difusor como tal.

Interior

Como no podía ser de otra manera, entrar en un Mercedes-Benz EQ es un lujo. Muy buenos materiales, plásticos blandos y cueros con ajustes de primer nivel, sorprendentemente con abundantes botones físicos y por supuesto con el impresionante sistema MBUX de infoentretenimiento, sin lugar a dudas el mejor del mercado.

La disposición de los botones es prácticamente idéntica al de los modelos compactos de Mercedes y el interior en general es idéntico al del Mercedes-Benz GLB (prueba). El volante es grande con un generoso aro, de fácil agarre, y con una mezcla de botones convencionales y de tipo háptico.

El ambiente es totalmente personalizado y acogedor, con una iluminación interior que permite 64 tonalidades cromáticas a base de LED.

Los asientos delanteros no son regulables eléctricamente sino manualmente, sólo los lumbares son eléctricos, pero la comodidad que se alcanza sigue siendo de 10.

2ª fila de asientos

La segunda fila de asientos del Mercedes EQB ofrece un espacio generoso para las piernas y muy buena anchura. Esta segunda fila de asientos se puede desplazar longitudinalmente (15 cm) en caso de necesitar más espacio para el maletero o para facilitar el acceso a la tercera fila. Son asientos cómodos, mullidos perfectos y reclinables para un mayor confort.

En su posición normal, tiene una gran distancia para las piernas de los pasajeros (967 mm), en altura y en hombros. La sobrelevación del túnel central y la estrecha plaza central, hace que sea para usos esporádicos. Eso sí, usado a modo apoyabrazos es muy útil y funcional.

Espacio hasta 7 asientos

El aspecto diferenciador del Mercedes-Benz EQB con sus rivales se centra en la posibilidad de montar una tercera fila de asientos (es un opcional que cuesta casi 1.200 euros) con dos butacas escamoteables homologadas para personas de una altura máxima de 1,65 m.

El acceso es para personas ágiles y un niño entra sin problema, ya que además del movimiento longitudinal de las butacas, está la posibilidad de abatirlas para facilitar el acceso. Sorprendente y de agradecer que en esta fila se incluyan anclajes isofix, además de contar con conexiones USB-C, perfecto para conectar aparatos de entretenimiento.

Tanto desplegarlos cómo abatirlos es muy sencillo, se hace desde el maletero, tirando de unas cintas en la parte baja y sin esfuerzo.

Capacidad de carga

El Mercedes EQB tiene una capacidad de maletero de 465 litros (limitado porque alberga 2 plazas traseras escamoteables – 495 litros el de 5 plazas), que bajan hasta los 110 litros si llevamos todos los asientos desplegados. Eso sí, si abatimos los respaldos de la segunda y la tercera fila de asientos, supera los 1.600 litros, dejando un piso plano enorme.

Tecnológicamente sobresaliente

Así es el sistema de Mercedes-Benz denominado MBUX. Nuevo aspecto de las pantallas que puede personalizarse con tres estilos de visualización (discreto/deportivo/clásico) y tres modos (navegación/asistencia/servicio).

El sistema MBUX está compuesto por dos pantallas de 12,3 pulgadas en horizontal, donde se ha mejorado la presentación de las funciones. Al activar los servicios online en la aplicación Mercedes me, el asistente de voz inteligente tiene una mayor capacidad de dialogar y aprender.

Sistemas de asistencia

La tecnología de sensores mejorada incluye una nueva cámara delante (Stereo Multi-Purpose Camera SMPC) y otra nueva cámara de marcha atrás con unos gráficos excelentes. El paquete opcional de asistencia a la conducción contiene funciones mejoradas en detalle.

El asistente activo de mantenimiento de carril tiene ahora un funcionamiento más cómodo, ya que interviene en la dirección en vez de en el ESP. Además incorpora, control electrónico de estabilidad, asistente de ascenso en pendiente, monitor de punto ciego, freno autónomo de emergencia, asistente de estacionamiento con cámara y sensores de proximidad, entre otros.

Motorización

Hablamos de la motorización intermedia de la gama, 300 4Matic, de 228 CV de potencia y 390 Nm de par motor y por supuesto con tracción total. La capacidad de la batería es de 70,5 kWh para homologar alrededor de 420 km, que para el enfoque que tiene, se me queda algo corta.

Se trata de un coche muy bien insonorizado y con una calidad de rodadura sobresaliente. Es súper cómodo para moverse por la ciudad, a parte de tener una gran autonomía para no tener que pensar en recargarlo con asiduidad.

Hay tres modos de conducción a través de lo que Mercedes denomina DYNAMIC SELECT: Eco, Comfort y Sport. Dependiendo de las necesidades en cada momento se piensa en eficiencia o en prestaciones.

Retención muy eficaz y con diferente niveles

Además tras el volante tenemos levas con las que modificamos la retención del coche al levantar el pie del acelerador. Hay tres niveles de retención que van desde el D- (retención muy enérgica sin llegar a detener el coche por completo) al D+ (se mueve más por inercia, sin apenas retención).

Además incorpora el nivel DAuto, es muy cómodo para su uso en carretera, aunque a veces te puedes llevar una sorpresa porque frene en exceso, y es que con este modo aplicado, el EQB varía la retención en función del límite de velocidad de la vía, la distancia respecto del vehículo precedente o la presencia de un cruce o rotonda, si llevas puesto el navegador.

Recarga de las baterías

La batería del Mercedes EQB se puede recargar a un máximo de 100 kW en corriente continua, en cuyo caso puede cargar del 10 al 80% en 32 minutos. En corriente alterna puede cargarse a 11 kW en corriente trifásica (tarda 5 horas y 45 minutos en cargar del 10 al 100%) y a un máximo de 7,4 kW en corriente alterna monofásica, del 10 al 100% requiere 9 horas y 15 minutos.

Para una recarga más fácil y rápida, el EQB cuenta con la función Plug & Charge de Mercedes me Charge; al enchufar el cable, el proceso de carga se inicia automáticamente, sin tener que identificarse. El vehículo y la estación de carga se comunican directamente a través del cable.

Dinámica enfocada a viajar

En ciudad a pesar de su tamaño no es un vehículo torpe, desde el puesto de conducción tienes una excelente visibilidad, la dirección es muy rápida en ejecución, el vehículo gira rápido y muy cerrado y se mueve con bastante soltura. Es verdad que tiene un tamaño que hay que mirar bien donde aparcar, pero la etiqueta CERO de la DGT facilita mucho la movilidad por grandes ciudades. Además el consumo es muy contenido.

Es ponerse en carretera y el Mercedes se transforma en una alfombra, va de lujo; la insonorización es perfecta y el confort interior es máximo, el EQB va de maravilla; el único pero, es que tienes que parar con mayor asiduidad de lo deseado a recargar baterías, pero si te organizas bien el viaje, y las recargas, no notarás mucha diferencia respecto a un combustión.

Lo conduces por carreteras reviradas y el coche va bien, no es su medio favorito, pero cumple y eso ya me vale. El motor recupera muy bien y si pisas, acelera con determinación, la frenada también tiene su punto, y sino llevas ningún nivel de retención, frena perfecto.

Consumos

Los consumos mínimos que hemos conseguido con el EQB se han cifrado en 19 kWh, en unas condiciones bastante favorables, hasta metidos en faena de una ruta mixta, los consumos han superado los 22 kWh.

Con estos valores, la autonomía real está rondando los 350-375 km, unas cifras que aún están por mejorar, pero que apuntan por el buen camino, y más teniendo en cuanta el tipo de coche que llevamos.

Conclusiones

El Mercedes-Benz EQB ha puesto el listón de los futuros SUV 100% eléctricos con hasta 7 plazas muy alto; se trata de un vehículo que prácticamente lo tiene todo, habitabilidad, calidad de rodadura, tecnología a bordo, multitud de sistemas de seguridad y asistencia a la conducción.

En el debe, (y prácticamente de casi todos los 100% eléctricos) la autonomía real (casi 100 km menos que la homologada) y el precio (no apto para todos los bolsillos).