53.000 paneles para atrapar el Sol, by SEAT
903 minutos de sol. Esa es la luz que tendrá el día más largo del año en el hemisferio norte del planeta. El 21 de junio tiene lugar el solsticio de verano, un fenómeno que da inicio a los tres meses del año con más horas de claridad y calor. España y la zona meridional europea gozan de entre 2.500 y 3.000 horas de sol anuales, una fuente de energía que SEAT recoge gracias a una de las mayores plantas fotovoltáicas de la industria del automóvil:
– Una planta fotovoltaica de 276.000 metros cuadrados: Con una extensión equivalente a 40 campos de fútbol, la compañía inauguró en 2013 un total de 6 plantas fotovoltaicas con más de 53.000 paneles solares. Ubicada en las cubiertas de los talleres y de la zona de campas, esta instalación ha generado más de 112 millones de kWh desde su puesta en funcionamiento.
– Energía para cargar 3.000 móviles al día durante un año: En esta planta fotovoltaica se generan más de 17 millones de kWh anuales, cantidad suficiente para abastecer las necesidades de una población de 15.000 habitantes o cargar 3.000 móviles cada día durante todo un año. La corriente generada se reutiliza a posteriori en la fábrica y representa el 6% del total energético que necesita Martorell. De hecho, esta energía ha permitido producir 67.000 coches desde la puesta en marcha de la instalación.
-Supervisión a vista de pájaro: Un dron se encarga de una parte del mantenimiento de esta instalación. Una vez al mes, sobrevuela toda la planta, equipado con un sensor visual y una cámara termográfica, para realizar un análisis de las placas y chequear su funcionamiento. En total, se hacen 16 vuelos, a 35 metros de altura, para llevar a cabo esta inspección.
-Un bien para el medio ambiente: Esta instalación también ayuda a tener un aire más limpio ya que reduce casi 4.000 toneladas de CO2 al año. Una reducción comparable a la que conseguirían cinco Central Park juntos, un pulmón verde de 17 kilómetros cuadrados, anualmente. El objetivo de la compañía para 2025 es reducir a la mitad, entre otros, el gasto de agua, las emisiones de CO2 y los residuos generados respecto al año 2010.